Esta receta es tan, tan, tan fácil que pensé en no compartirla. Luego lo (re)pensé mejor y me dije... seguro que hay alguien que lee el blog y que no tenga mucha idea de cocinar pero que quiere ir metiéndose poco a poco en la cocina y en el complicado mundo de la repostería (digo complicado porque las recetas de repostería requieren precisión y medidas exactas, no así lo salado que admite posibilidad de variación y de añadirle toque personales). Así que para ti que no quieres dulces rimbombantes, ni complicados, ni con cuarenta ingredientes, para ti es esta receta. Sencilla a más no poder y rica para repetir hasta terminar con todas las existencias que hayas horneado.
Con una lámina de hojaldre, un poco de fruta y azúcar tienes un postre de lo más apañado y rico. Yo le he añadido fresas pero podemos hacer estas barritas con otro tipo de fruta como peras, manzanas, mangos... No es excesivamente dulce y a la vez se convierte en algo delicioso con un toque delicado al dulzor propio de la fruta.Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre.- 10 fresas, aunque esto depende del tamaño.- 25 grms de mantequilla fundida.- 2 cucharadas de azúcar.- 1/2 cucharadita de canela molida.Preparación:
Cortaremos el hojaldre en tiras rectangulares de 10x3 cm. Lavaremos muy bien las fresas, les quitaremos el pedúnculo y las cortaremos en cuadraditos pequeños. Iremos colocando las fresas en el centro de los rectángulos de hojaldre. En los rectángulos que no lleven fresas haremos pequeños cortes longitudinales. Colocaremos estos rectángulos sobre los que lleven las fresas y los sellaremos con ayuda de un tenedor o la punta del cuchillo presionando ligeramente. Pincelaremos las barritas con la mantequilla derretida y espolvorearemos con el azúcar y la canela, que habremos mezclado previamente. Sobre la placa del horno colocaremos un silpat o papel de horno. Hornearemos a 200º, horno precalentado con calor arriba y abajo, unos 15 minutos o hasta que adquieran un tono dorado.