De sobra sabéis que las tartas de queso son mi dulce favorito, antes que el chocolate. Hoy os traigo una combinación deliciosa. No he puesto mermelada de frutos rojos por encima de la tarta, lo que normalmente se suele hacer en este tipo de dulces si no que he preparado un glaseado que le da un toque diferente.He aprovechado unas naranjas buenísimas y muy dulces que tenia en casa, ya las ultimas de la temporada, que son del huerto de mi suegro.
El resultado es una tarta bastante esponjosa, no demasiado dulce pero muy agradecida de comer. Yo le he puesto como base la galleta maría de toda la vida y le da un toque a caramelo muy rico.Ingredientes:
Para la base:- 70 g de galletas.- 40 g de mantequilla.Para el cuerpo del cheesecake:- 250 g de queso de untar.- 50 g de mantequilla.- 45 ml de zumo de naranja.- 75 g de azúcar.- 55 ml de leche.- 45 g de harina.- 4 g de levadura química.- Ralladura de media naranja.- 2 huevos.- Una pizca de sal.Para el glaseado:- 80 ml de zumo de naranja.- 1 hoja de gelatina.- 20 g de azúcar.- 1/2 cucharadita de agua de azahar.
Preparación:
Preparemos la base triturando las galletas y mezclandolas con la mantequilla derretida. Engrasaremos un molde redondo desmoldable de 20cm y pondremos en la base papel de horno. Extenderemos la capa de galletas sobre la superficie del molde y aplastaremos con el dorso de una cuchara. Meteremos en la nevera por espacio de 20-30 minutos. Mientras derretiremos la mantequilla y dejaremos entibiar. Agregaremos el queso de untar, el azúcar y la ralladura de naranja y mezclaremos. Incorporaremos el zumo de naranja y las yemas y batiremos. Añadiremos la harina y la levadura tamizadas. Incorporaremos con movimientos envolventes las claras a punto de nieve, las cuales habremos montado con una pizca de sal para que nos queden mas firmes. Verteremos sobre la base de galleta y hornearemos a 160º con calor arriba y abajo (horno precalentado) durante 1 hora y 20 minutos. Una vez pasado este tiempo dejaremos metido en el horno y con la puerta cerrada 10 minutos. Luego abriremos un poco la puerta y dejaremos que enfríe por completo. Una vez frío el cheesecake prepararemos el glaseado y para ello hidrataremos la gelatina en agua fría durante 5-10 minutos. En un cazo calentaremos el zumo con el azúcar, antes de hervir retiraremos del fuego y agregaremos la gelatina hidratada y escurrida. Removeremos bien. Añadiremos el agua de azahar. Dejaremos reposar 15 minutos a temperatura ambiente para que coja un poco de cuerpo y verteremos sobre el cheesecake. Meteremos en la nevera y lo dejaremos por espacio de 3 horas mínimo.