Hace unas semanas tuve la enorme fortuna de participar en la Master Class de Alfredo Gil, con motivo de ser una de las ganadoras del II Concurso Cocinillas Ahorramás.El encantador chef Alfredo Gil nos preparó, entre otras delicias, este delicioso postre navideño que está de locura.
Tan sólo necesitáis unos pocos ingredientes, entre los que se encuentra el famoso turrón blando de Jijona. Así que, en lugar de comer el turrón esta Navidad a la manera tradicional, cortadito y en bandeja, preparaos para comerlo semilíquido y esponjoso, recién horneado.
Para 10-15 coulants:
- 1 tableta de turrón de blando de Jijona (Alfredo Gil pone 300 g en su receta, pero la tableta tiene sólo 250 g)
- 6 huevos, separadas claras y yemas
- 5o g de azúcar glaçe
- 100 g de harina de repostería
- 1/2 cucharadita de canela
- 200 g de nata para montar (1 brik)
- 1 pizca de sal
- mantequilla para engrasar los moldes
- natillas para el emplatado
- frutos rojos
- cacao en polvo
Se pone la nata y el turrón en una cazuela al fuego con la canela en polvo y se deja que de deshaga, removiendo con una cuchara de madera.
Cuando esté cremoso, se retira del fuego y se deja atemperar.
Se precalienta el horno con aire, con calor arriba y abajo a 180ºC. Cuando esté caliente se pone la harina en una fuente o en la bandeja y se deja tostar unos 10 minutos. Este es un truco que nos dio Alfredo para que el coulant no sepa a harina cruda.
Se ponen las claras en un bol con una pizca de sal y se montan con varillas eléctricas. Cuando estén casi montadas se añade casi todo el azúcar glaçe.
Por otro lado, se baten las yemas con un poco de azúcar hasta blanquearlas (significa que estén espumosas).
Se mezclan las yemas con las claras, se añade la harina tamizada y se remueve suavemente.
Por último se añade la crema de turrón y se vuelve a remover con movimientos envolventes:
Se engrasan unos moldes individuales con mantequilla y azúcar glaçe y se rellenan en unas 3/4 partes con la crema.
Se introducen en el horno y se hornean 8 minutos. Si los dejáis más tiempo se os hace mucho la parte central. Probad a ver cómo os quedan con este tiempo, cada horno es un mundo.
Una vez horneados, se desmoldan y se presentan sobre una base de natillas o de crema inglesa, con unos frutos rojos o espolvoreados de cacao en polvo, azúcar glaçe, canela, pistacho pulverizado... lo que prefiráis.