Educar con una sonrisa es el nombre del libro que promete en convertirse en manual de referencia de todos los padres que queremos educar en positivo.
Me enteré de su existencia por redes sociales y mi querida amiga Carmen me lo regaló en nuestro afán común de seguir aprendiendo a ser unas mamás estupendas
No podía, Carmen Pérez Saussol haber elegido mejor título para su libro, porque esta psicóloga, madre de tres niños predica con el ejemplo; no la veréis nunca sería, es la mujer de la eterna sonrisa.
Carmen Pérez Saussol en una de las fotos de la promoción de su libro
El libro se presenta como una guía, un manual, que nos va poniendo ejercicios, que nos hace preguntas para hacernos reflexionar y tomar decisiones en positivo en la crianza de nuestros hijos.
En el encontramos capítulos con títulos como estos: “¿Qué es educar?” (ahí es nada vaya preguntita), “Asumir nuestra responsabilidad como educadores”, “Adolescencia”, “Educar en positivo” … y en cada uno de ellos Carmen nos pone deberes, ejercicios como en el cole con los que nos hace reflexionar sobre nosotros mismos, nuestras formas de educar y de enfrentarnos a la infancia y adolescencia de nuestros hijos. Ejercicios de verdad con rayitas en blanco para rellenar…
Me encanta que cada capítulo lo acaba con un resumen, una moraleja, un párrafo en negrita que recordar en todo momento.
La presentación del libro fue un éxito total, lo que indica lo interesados que estamos los padres en aprender. Llenazo absoluto del Hemiciclo de la Facultad de Letras de Universidad de Murcia.
El libro fue presentado por la autora, los profesores de la Universidad de Murcia Prof. Dr. D. Francisco Jarauta y Dra. Dña. Ana María Sánchezla periodista y locutora Dña. Mónica Martínez. Las fotos son cedidas por Luis Urbina, gracias compi.
Personalmente, aún no he acabado el libro, estoy tardando más de lo que esperaba en leerlo por el tiempo que me está llevando pensar, meditar y completar los ejercicios. Me está despertando inquietudes, haciendome sentir bien al descubrir que no lo hago tan mal pero sobre todo transmitiendo tranquilidad, yo también puedo educar en positivo. No es tan difícil.
Gracias Carmen por este manual.
Mil besos, mil SONRISAS para educar
Ana
PD: en mi firma ya están las sonrisas, un paso dado.