Este es un pastel diferente y sobre todo muy curioso, ya que la magia está en que primero se pone la masa de bizcocho en el molde y sobre ella el flan, pero cuando lo sacas del horno el orden se a invertido y el flan está abajo y encima el bizcocho, todo un delicioso enigma.
No solo tiene magia este pastel también es un postre muy sabroso, ya que el bizcocho es tipo brownie y no queda esponjoso, pero si muy jugoso y con un sabor insuperable, además tiene la compañía del flan que le aporta un sabor y textura como ningún otro dulce. Yo te aconsejo que lo prepares aunque te pueda parecer complicado no lo es para nada, ya que es muy fácil de preparar, tan solo un poco laborioso pero te aseguro que vale la pena, además es un postre ideal para preparar con nuestros peques, ya que seguro que se divierten y les encanta el resultado.
Espero que este postre se convierta en una de tus recetas preferidas, como siempre te digo si necesitas cualquier aclaración sobre la preparación sólo tienes que dejarme un comentario.
Tiempo:
15 minutos + horneadoValor Calórico:
altoDificultad:
bajaCantidad:
8 PersonasIngredientes
Para el bizcocho- 125 g de chocolate negro o cobertura
- 80 g de mantequilla
- 3 Huevos
- 130 g de azúcar
- 80 g de harina de trigo
- 2 Cucharadas de cacao en polvo
- 300 ml de leche entera
- 5 Huevos
- 130 g de azúcar
- 100 g de azúcar
- 2 Cucharadas de agua
Preparación
- Precalienta el horno a 180º centígrados.
- Unta el molde que vayas a utilizar con aceite o mantequilla.
- Derrite la mantequilla en el microondas.
- Derrite el chocolate puedes ponerlo un par de minutos en el microondas o al baño María.
Elaboración
Primero prepara el bizcocho.Casca los huevos y los echas en un bol.
Bátelos con una varilla.
Añade el azúcar y sigue batiendo un par de minutos. En otro bol echa la mantequilla derretida y el chocolate también derretido.
Remuévelo bien hasta que quede todo bien mezclado.
Vierte el bol de la mantequilla y el chocolate en el otro bol de los huevos y el azúcar.
Lo bates hasta que quede todo bien integrado.
Añade la harina y el cacao en polvo.
Sigue batiéndolo hasta que consigas una masa homogénea y sin grumos.
Cuando lo tengas batido reserva la masa.
Ahora prepara el flan.
En un bol o vaso de batidora casca los huevos.
Añade también el azúcar y la leche entera.
Con una batidora lo mezclas unos minutos hasta que todo quede bien mezclado.
Ya tienes el flan preparado, resérvalo también.
Si no quieres hacer tu el caramelo líquido puedes utilizar caramelo líquido o sirope ya preparado.
Si lo preparas tu pon una sartén a fuego medio.
Echa el azúcar y las cucharadas de agua.
Déjalo que hierva hasta que empiece a coger un color tostado.
No lo remuevas con una paleta.
Remueve la sartén para que se caramelice todo por igual.
Cuando tenga un color tostado retira la sartén del fuego.
Echa el caramelo en el molde.
Remueve el molde para que se reparta el caramelo por todo el fondo.
Deja que se enfríe un poco el caramelo.
Ahora ya puedes echar el bizcocho que habías reservado.
Vierte la masa de bizcocho en el molde.
Con una paleta la repartes bien y que quede uniforme.
Remueve el flan que habías reservado y lo viertes el molde sobre la masa del bizcocho.
Introduce el molde en el horno precalentado a 180º y al baño María.
Hornéalo durante 50 minutos aproximadamente.
Pasado este tiempo ya lo tienes listo.
Para saber seguro que está listo, pínchalo con un palillo y te saldrá seco pero solo por el flan, el bizcocho estará un poco mojado, ya que es muy jugoso.
Saca el molde del horno.
Cuando esté bien frío ya puedes desmoldarlo.
Despega las paredes del molde con un cuchillo.
Pon un plato sobre el molde y con cuidado le das la vuelta.
Dale unos golpes al molde para que se suelte.
Ya lo tienes listo para servir.
Si lo prefieres puedes decorarlo a tu gusto.
Consejo
- El tiempo de horneado es orientativo y puede variar según el tipo de horno.
- El bizcocho no tiene que quedar esponjoso ya que es tipo brownie y es más bien jugoso.
- Si ves que el bizcocho se empieza abrir durante el horneado puedes ponerle un papel de aluminio encima para que no se seque tanto.