Involtini de calabacin con queso y pesto

Incluir verduras y legumbres en la dieta puede ser una hazaña de lo más divertida, solo hay que buscar ese ingrediente que se te resiste y darle la vuelta de manera que quede vistoso, colorido y sobre todo apetecible. Que levante la mano en la sala quién no se comería un involtini de los que hoy os traigo, Una versión muy diferente a los originales pero tan ricos y sabrosos que van a ir de cabeza a tu recetario personal. Rápidos de hacer y más rápidos de comer. Vamos con la receta.

INGREDIENTES

2 Calabacines.

200 gr. de queso ricotta.

2 cucharadas colmadas de salsa de pesto.

1 cebolla.

1 zanahoria.

1 ramita de apio.

1 diente de ajo.

400 gr. de salsa de tomate estilo casero.

100 gr. de lentejas cocidas.

Queso parmesano en polvo.

Sal y pimienta al gusto.

1. Ponemos una sartén al fuego y sofreímos con un poco de aceite la cebolla, la zanahoria el diente de ajo y el apio picados muy finos. Cuando comiencen a dorarse, añadimos las lentejas, removemos y cocinamos un par de minutos más. Añadimos la salsa de tomate, un chorrín de agua y dejamos cocinar todo a fuego lento. Salpimentamos al gusto.
2. Lavamos los calabacines y los cortamos a lo largo con ayuda de un cuchillo, un pelador o una mandolina. Los disponemos sobre un paño de cocina y espolvoreamos un poco de sal. En un cuenco, mezclamos bien la ricotta con el pesto. Reservamos.
3. Juntamos dos láminas de calabacín, en un extremo colocamos una cucharada de ricotta con pesto y enrollamos dando forma de canelón o rollito. En una fuente para horno, extendemos la salsa de tomate y vamos colocando los rollitos de calabacín. Espolvoreamos con el parmesano y horneamos a 180º hasta que comiencen a dorarse. Servimos calientes. 

¡No me digáis que no son apetecibles! y en un plis hemos incluido en el plato lentejas y calabacín, ingredientes que muchas veces se resisten a algunos miembros de la familia (normalmente los más peques) y que os aseguro que se van a comer de maravilla en esta preparación.

Un plato que seguro que va a ser un éxito en tu próxima reunión con amigos. Imagina una cena en una terraza en verano, y que sacas estos involtini con un buen vino. Seguro que nadie se va a poder resistir, pero eso si, no avises a nadie de que le vas a dar lentejas para cenar, o más de uno pensará en cambiar de plan a última hora.

A la hora de servir me encanta añadir un poquito más de parmesano en polvo por encima y si tenéis a mano unas hojas de albahaca, le darán un toque delicioso y potenciará el sabor del pesto del relleno. También podéis añadir por encima unos piñones tostados para dar un toque crujiente. Quedará espectacular.

Otra cosa buena que tiene este plato es que lo puedes dejar preparado con antelación, incluso el día antes, y hornear media hora antes de servir y quedará igual de rico. Espero que os animéis a preparar este plato tan rico, parece laborioso, pero os aseguro que en un ratito lo tenéis listo.