Revista Cocina
Hace tres primaveras planté un limonero con la ilusión de verlo crecer y que algún día me diese ricos limones.Como no tengo jardín el pobre tiene que conformarse con vivir en una maceta... muy grande, eso si.Además tiene la mala suerte de que durante el invierno, el viento sopla con fuerza deformando sus delicadas hojas. La semana pasada estuve limpiando malas hiervas, hojas secas y flores muertas cuando me llevé una gran sorpresa al ver las primeras flores de mi sufrido limonero.
No sé si llegarán a algo más ¡ojalá!por lo pronto a mi me han dibujado una sonrisa.
Y entre las hojas retorcidas, mimetizada en su color, me encontré a esta pequeña araña,que aunque en la foto parece feroz... su tamaño no era mayor que el de una lenteja.La dejé tranquila en su telaraña protegiendo de indeseables plagas a mi maltrecho arbolito.
Por último, escondido en un rincón bajo el borde de la maceta estaba este caracol.Al que después de hacerle unas fotos busqué mejor lugar para él fuera de mis dominios...jejejeque cuando te despistas tienes cientos de caracolillos diminutos comiéndose los tiernos brotes de tus plantas.
Con esta entrada participo en el "blog hop" de NIKA VINTAGEMe voy a ver que nos cuentan el resto de participantes, ¿os venís conmingo?
Gracias por vuestra visita, que tengáis un feliz día.