Revista Cocina
Se hacen mousses de muchas cosas y por qué no de gambas. Me parece una manera diferente para tomar las gambas, que aporta esponjosidad y suavidad sin que se pierda el sabor. La pondré sobre unos volovanes y veréis lo bien que quedan para un aperitivo o entrante. No tiene dificultad ninguna, es ponerse.
Dice acerca de las mousses la Wikipedia, que el primer dato que se tiene de ellas se registra en un recetario francés de 1755, atribuida al cocinero de esta nacionalidad Menon y su libro "Les soupers de la cour". Aquí se dice que las mousses se hacen con nata batida pudiendo añadir claras de huevo.
En este caso he preferido no poner claras para no saturar de huevo la mousse, ya que lleva mayonesa. Igualmente en lugar de agar-agar, muy recomendado para dar consistencia a éstas, he puesto gelatina neutra. Yo os doy una idea, luego vosotros elegís lo que prefiráis.
En la cocina hay que probar y si se falla se ha fallado, es la única manera de aprender. Si ese día hay que tirar la comida no os apuréis siempre queda preparar "a todo gas" una pasta o unos huevos fritos con jamón. Me imagino al personal hambriento y con las tripas bailando y me parto, jajaja ¡No tenemos espera!
Ingredientes:
- Nata 35% 150 g.- Mayonesa sazonada con sal y limón 150 g.- Gambas cocidas y peladas 100g.- Agua de cocer las gambas 4 cdas. soperas.- Gelatina neutra 4 hojas.- Volovanes mini.- Pimientas molidas surtidas.
Elaboración:
Triturar las gambas hasta hacerlas puré, no deben quedar restos pues al pasarlas a la manga, de quedar algún trocito, impedirían su salida.
Hidratar la gelatina en agua fría durante diez minutos. Pasado este tiempo escurrir bien y diluir en el caldo de las gambas (muy caliente). Reservar hasta que enfríe.
Montar la nata que tiene que estar muy fría, y sin poner sal. Reservar en el frigo.
Mezclar la mayonesa con las gambas trituradas e integrar perfectamente.
Añadir la gelatina diluida. Por último incorporar la nata con suavidad, aireando.
Dejar solidificar en la nevera unas cuatro horas.
Pasar la mousse a una manga pastelera y rellenar los volovanes, adornar con las pimientas surtidas molidas. Servir frío. Es mejor rellenar un momento antes de consumir para que no se nos reblandezcan los volovanes.
Otra opción es rellenar espárragos blancos de grosor medio-grande pero tendréis que quitarles el exceso de agua para que la mousse no se desluzca. Abrir los espárragos con cuidado de no romper las yemas, ponerlos sobre papel absorbente una hora aproximadamente y rellenar con la manga.