Pan de muerto

El pan de muerto es parte esencial de la Fiesta del día de los Difuntos, especialmente en México, donde el Altar de muertos muestra ofrendas de flores, objetos, velas y alimentos.

Uno de dichos alimentos que no puede faltar es este postre, un dulce que os volverá locos, es jugoso, con ese toque que le aporta el agua de azahar (que lo asemeja al Roscón de Reyes) y que está lleno de simbologías en estos días.

Con estas cantidades vamos a obtener dos panes, y si los probáis poco os va a parecer.

INGREDIENTES (para 2 panes):

- 500 grs. de harina de fuerza
- 170 ml. de leche entera
- 80 grs. de azúcar
- 3 huevos
- 20 grs. de levadura fresca
- 125 grs. de mantequilla- 20 ml. de agua de azahar
- Ralladura de naranja (y limón opcional)
- Pizca de sal
- 1 huevo para pintar
- Azúcar para decorar
- Mantequilla para pintar

PREPARACIÓN (En Thermomix):

Ponemos la leche (170 ml.) y la levadura (20 grs.) en el vaso y programamos 2 minutos a 37º vel. 3.

Añadimos el azúcar (80 grs.), los 3 huevos, el agua de azahar (20 ml.), la ralladura de naranja, la pizca de sal y la harina (500 grs.). Mezclamos durante 30 segundos a velocidad 6.

Por último incorporamos la mantequilla (125 grs.) y mezclamos todo durante 5 minutos a velocidad espiga.

PREPARACIÓN (Clásica):

Ponemos en un bol la harina (500 grs.) y ponemos la leche tibia (170 ml.) en la que hemos diluido la levadura fresca (20 grs.). Añadimos el azúcar (80 grs.), los 3 huevos, el agua de azahar (20 ml.), la ralladura de naranja y la pizca de sal. Mezclamos todo hasta que esté integrado.

Por último incorporamos la mantequilla (125 grs.) hasta conseguir una masa homogénea y lisa. Esto a mano nos puedo llevar 10 minutos. Si tenemos una amasadora nos facilitará el trabajo.

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Reservamos la masa en un bol y la tapamos. La dejaremos que doble su volumen durante aproximadamente 1 hora.

Pasado ese tiempo, la amasamos un poco para desgasificar la masa y la partimos en dos mitades.

De una de las partes, vamos a cortar un tercio de la masa. Con los otros 2/3 de masa haremos una bola grande. 

Con el tercio pequeño, lo vamos a dividir en 3 partes iguales. Dos de ellas vamos a formar la cruz. Para ello hacemos un churro alargado y con los dedos le damos forma, para conseguir como cuatro bolitos unidas por un cordón. Repetimos con la otra tira. 

Lo colocamos encima de la bola, creando una cruz. Con el tercer trozo, vamos a hacer una bola que clavaremos justo en el centro de nuestro pan, en la parte superior.

Repetimos el proceso con la otra mitad que teníamos reservada.

Tapamos los dos panes con papel film y dejamos que vuelva a doblar el volumen. Aproximadamente otra hora.

Precalentamos el horno a 180ºC.

Pincelamos con huevo nuestro pan y lo llevamos al horno durante aproximadamente 30 minutos o hasta que esté dorado.

Lo sacamos a una rejilla y dejamos que enfríe. 

Ya frío lo pintamos con mantequilla derretida y espolvoreamos azúcar por todo el pan.

Y a disfrutar. Queda un pan jugoso y tierno que está espectacular.

¿Os animáis a probar?