Rosas de manzana

La manzana, la fruta prohibida, aquella por la cual conocimos a Adán y Eva. La que relacionamos con la bruja que envenenó a Blancanieves. La manzana dorada de la discordia entre Paris y Afrodita, que dio lugar a la guerra de Troya. En contraposición a la representación del pecado original y  la envidia, podemos encontrar también la manzana de Guillermo Tell, el descubrimiento de Isaac Newton de la ley de la gravedad con la caída de la manzana del árbol, o la costumbre en algunos países de regalar una manzana al profesor, como símbolo de la fortaleza del aprendizaje.

Fuera de el bagaje de la manzana a través de los siglos, de su amplia simbología y de las connotaciones a veces malas y otras, mejores, la manzana se consolida como una de las frutas más saludables y consumidas en todo el mundo.

Estas rosas que te traigo hoy son de muchos conocidas, sin embargo aún no tenían el rinconcito que merecían en este blog y por eso, decidí reavivar la idea. Es impresionante lo increíblemente preciosas que lucen las manzanas en este postre. Y lo fácil que es conseguir transformarlas en rosas.

Ingredientes (6 rosas)

• 1 lamina cuadrada de hojaldre fresco
• Mermelada de manzana (puede ser de fresa, albaricoque o hasta crema de cacao)
• Canela
• 2 manzanas rojas descorazonadas y partidas del mismo grosor con cáscara
• 200 ml de agua
• Zumo de medio limón
• Azúcar glass, para decorar

Parte la manzana por la mitad y a cada mitad, quita el hueso. Corta en rebanadas del mismo grosor, ni muy delgadas ni muy gruesas.

En un bol pon unos 250 ml de agua con el zumo de medio limón, sumerge las manzanas y mételas al microondas un par de minutos o tres hasta que estén suavecitas.

Si omites este paso, será imposible que tomen la forma al enrollarlas.

Con el limón, consigues que no se oxiden y como ves en las fotos, la manzana mantiene un precioso color incluso después del horneado.

Escurre las manzanas y deja enfriar unos minutos antes de proceder al montado de la rosa.

Precalienta el horno a 190º por arriba y por abajo.

Corta la lámina de hojaldre en dos mitades y de cada mitad saca tres tiras iguales.

Extiende la tira de hojaldre, pon un poco de mermelada al gusto (yo prefiero de manzana) y espolvorea canela.

Coloca de la mitad para arriba las manzanas, solapando una con otra. Se usan aproxidamente 8 rebanadas por rosa.

Dobla la mitad del hojaldre hacia arriba de manera que cubra la manzana.

Enrolla desde un extremo al otro con cuidado de que las manzanas no se salgan, ni la mermelada (si está ha sido puesta en exceso).

Engrasa un molde de magdalenas, para evitar que el hojaldre al hornearse se quede pegado. Coloca una a una en el molde.

Hornea a 170º durante unos 40 minutos o hasta que el hojaldre esté hecho y la manzana doradita, sin llegar a quemarse.

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