
Tengo que confesaros que aún hoy me gustán más las salchichas preparadas de esta forma, porque están más crujientes y el plato queda divertidísimo para los niños.Son muy sencillas, tan solo hay que tener la paciencia de cortar por cada extremo la salchicha en 3 tiras y estas a su vez por la mitad, dejando un trozo en el centro sin cortar.Luego pintamos los ojitos con ketchup y le echamos imaginación!!

Bueno espero haberos traido buenos recuerdos, a mi me encanta poder vivir ahora con mis niños, lo que tanto me gustaba de pequeña y me encantaría lograr que aprecien lo que tienen tanto como lo sé apreciar yo.Besitos, y un clásico, cuidad a las abuelas porque sus fogones son sin duda el mejor calor al que podemos arrimarnos. Nos vemos.
