Con el verano y la llegada del buen tiempo cada vez se hace más apetecible salir a tomar algo a una terracita. Normalmente acompañamos nuestra bebida de algún tipo de tapa para picar. Una gran parte de estas tapitas que se nos sirven, son diferentes tipos de alimentos que suelen coincidir en la manera de estar cocinados, la mayoría suelen ser fritos: patatas fritas o bravas, croquetas, calamares a la romana o a la andaluza, pescadito frito y un larguísimo etcétera.Pero, ¿Son los fritos tan malos como nos los pintan?
La fritura consiste en una cocción en la que el alimento es sometido a una inmersión rápida en un baño de grasa o aceite que está a elevada temperatura (entre 150 y 180º C). Los alimentos que contienen almidón, azúcar o albúmina se pueden sumergir directamente en el aceite o grasa, pero los demás alimentos conviene cubrirlos con alguna capa que recubra el alimento, como los empanados y rebozados, que deberá ser más gruesa cuanta más agua contenga el alimento.
Los ingredientes que se pueden utilizar para freír pueden ser muy variados, desde pescados o carnes a verduras u hortalizas.La fritura es un método de cocción muy rápido y fácil de realizar, a la vez que puede ser un buen modo de introducir aquellos alimentos que menos gustan a los niños como la verdura y el pescado.
¿FRITOS PRECOCINADOS O FRITOS CASEROS?
Podemos comprar en los supermercados alimentos precocinados ya apunto de freír y comer, o podemos optar por elaborarlos en casa. En el caso de los primeros, hay que tener en cuenta que suelen llevar una gran cantidad de aditivos, a la vez que la capa de rebozado puede ser excesiva, haciendo que la cantidad del ingrediente principal sea mínima. Por ejemplo una barita de pescado con una mayor capa de rebozado que de pescado.Un alimento frito elaborado en casa, puede ser la mejor opción, ya que se conoce la cantidad y la calidad de los ingredientes empleados.
¿CÓMO HACER UNA BUENA FRITURA?
Una buena friturase obtiene cocinando el alimento en un buenaceite a una temperatura constantemás o menos elevada según el tamaño, y durante un espacio de tiempo reducido. De este modo el alimento conserva sus propiedades nutritivas y resulta más jugoso.Para poner el alimento a freír hay que esperar a que el aceite se encuentre a la temperatura deseada, no excederse en el tiempo de cocción más de lo necesario, no freír demasiada cantidad de alimento cada vez para que éstos se cocinen por igual y hacerlo en el último momento para obtener una textura exterior crujiente. Después de freír el alimento conviene depositarlo sobre papel de cocina absorbente para desechar el exceso de grasa.
LA IMPORTANCIA DE UTILIZAR UN BUEN ACEITE
Emplear un buen aceite en la elaboración de una fritura es una de las cosas más importantes a tener en cuenta.El aceite de oliva es el más adecuado, ya que es el que mejor resiste las elevadas temperaturas que se utilizan para freír (180-200º C), además de ser más estable y presentar una menor descomposición. Esto último hace que el alimento se impregne menos con el aceite y que por lo tanto contenga menos calorías y sea más digerible.No es recomendable mezclar aceites de diferente origen, ya que cada uno tiene puntos de humo distintos (siendo los aceites de semillas menos resistentes a la temperatura que el aceite de oliva), ni tampoco mezclar aceite usado con aceite nuevo.Aunque al freír un alimento aumenta su cantidad de grasa y en consecuencia de calorías, también tiene como punto positivo, que si utilizamos un buen aceite, enriquecemos el alimento con grasas saludables. En el caso de utilizar aceite de oliva, enriquecemos con grasas monoinsaturadas que contribuyen a aumentar el llamado colesterol bueno (o HDL), a la vez que disminuye el malo (o LDL). Si el aceite utilizadp es de semillas, el alimento se enriquece en ácidos grasos omega 6 (linoleico) y omega 3 (linolénico), que contribuyen a disminuir los niveles de colesterol total y de triglicéridos en plasma.
Las frituras no tienen en general buena fama, porqué se suelen considerar como alimentos grasos, indigestos y muy calóricos. No obstante un frito bien elaborado puede ser una buena opción para toda la familia. Basta con elegir ingredientes sanos, un buen aceite y seguir unas sencillas recomendaciones. Como casi siempre en lo que alimentación y nutrición se refiere, una vez más no prohibiremos, sino que bastará con recomendar hacer un consumo moderado de este tipo de alimentos y siempre dentro de una alimentación variada y equilibrada.
Y a disfrutar del verano!