Esta receta de tarta de queso es la que preparo siempre en casa pero, en esta ocasión, en lugar de cubrirla de mermelada de fresas he optado por hacer una gelatina partiendo de mermelada de mandarinas, además le he añadiendo a la mezcla de queso “polvo de mandarinas” casero que suelo tener, ha quedado riquísima.
Ingredientes:
500 grs. de queso crema (yo, Quescrem natural..buenísimo!)
2 yogures naturales sin azúcar
10 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de Maizena
4 huevos
1 cucharada de polvo de mandarinas casero(podéis sustituir por ralladura de naranja)
Para la gelatina de mandarinas:
200 grs. de mermelada de mandarinas (ó de naranja)
3 hojas de gelatina
Un poco de agua
Para adornar:
Gajos de mandarina y ralladura de su piel
Ponemos en un bol grande el queso crema, yogures, azúcar, Maizena y huevos.
Batimos hasta hacer una crema, le ponemos el polvo de mandarinas y removemos bien.
Engrasamos un molde con mantequilla y vertemos la mezcla.
Horneamos, en horno precalentado a 180 grados, durante unos 45-60 minutos, depende de los hornos.
Comprobamos que está hecha pinchando con una brocheta que debe salir limpia.
Dejamos templar.
Preparamos la gelatina:
Ponemos las hojas a hidratar cubiertas de agua fría.
Ponemos la mermelada en un cazo junto a unos 50 c.c. de agua.
Dejamos que hierva, retiramos y disolvemos bien.
Colamos y le añadimos las hojas de gelatina bien escurridas, removemos hasta que se disuelvan bien.
Cubrimos la tarta y dejamos enfriar en el frigo hasta el día siguiente.
Decoramos a nuestro gusto y servimos.