Pocas cosas odio mas que las entradas pendientes, y esta era una de ellas; además tiene un desarrollo curioso, que espero sepan perdonar ; la cata y disfrute de este vino se produjo hace ya algunas lunas, finales de octubre , la última vez que el blog al completo tomó sus arreos y se presentó en Borja . Es ya una tradición ya mas sagrada , cada vez que nos juntamos por tierras mañas, que oir a la afición del Liverpool FC cantar el You’ll never walk alone antes del comienzo de un partido (*). Lo especial de la entrada es que, en esta ocasión, no hablaré del mejor vino de los dos que tomamos aquella noche, a la sombra de un excelente solomillo a la piedra , sino del único al que le hice la oportuna anotación en la mesa . Entono el mea culpa, el alcohol provocó estragos en mi moral y mi capacidad bloguera , y por tanto, golpéo mi cabeza con mi libreta de notas , en señal de penitencia , ya que aún en mi recuerdo, está el otro vino, un Berola 2009 de la misma bodega, que nos dejó a todos encantados ; pendiente su cata está, para cuando con una botella me haga, ya que es un vino que merece el honor de volver a el ; mientras tanto, aquí mis notas sobre el Tres Picos 2011 que cerró la noche.
Etiqueta Berola
El Tres Picos 2011 está elaborado por las Bodegas Borsao, en el propio municipio de Borja (Zaragoza) , perteneciente a la D.O. Campo de Borja , uva garnacha 100% de viñedos entre 600 y 700m de altitud ; debe su nombre a los tres picos reconocibles en el Moncayo, a saber, Peña Negrilla , el Moncayo propiamente dicho y Lobera; tiene una crianza de 5 meses en barrica francesa nueva ; en fase visual el vino tiene un color rojo cereza de capa media, poderoso en nariz, marca bastante su paso en madera, canela,vainillas y bollería, por debajo la fruta roja madura , algo de cacao también , en boca es un vino de cuerpo denso, potente, rozando la opulencia, o traspasándola claramente, goloso y frutal, mentolados, amplio y poderoso el juego de su acidez y grado ; un vino plagado de altas puntuaciones por los expertos (90 puntos Parker, 93 Peñín por ejemplo ) . Temo que me estoy desviando de su camino ; hace un tiempo me enamoraba su poderío, su untuosidad, pero quizás ahora me empalaga un poco, aunque no dudo que volveré a él la próxima ocasión que me siente en la mesa de La Boveda del Mercado.
R.
(*) aunque no te guste el futbol, no tienes sangre si no te emociona escuchar a la gente de Anfield cantar esta canción