La ciudad de Lisboa está llena de encanto, además a ambos lados del río Tajo, y cruzarlo en los ferris es toda una experiencia gratificante. En el país vecino podréis disfrutar de platos como la feijoada, dulces como sus famosos pasteles de nata de Belem o deliciosos mariscos, siempre a muy buen precio. Si os estáis planteando hacer una escapada a Lisboa y os gusta el buen comer, seguid leyendo y guardad esta entrada entre vuestras favoritas.
Además, gracias a Easyjet podrás hacer esta escapada a muy buen precio, con opciones de salir desde Madrid, Asturias, Bilbao o Valencia. Una ocasión que debéis aprovechar y disfrutar con los vuestros.
Dónde comer en Lisboa
Si os gusta el pescado, mi recomendación es Aquí ha peixe, un restaurante elegante con buen precio en el que os sorprenderá la calidad de los platos y la buena elaboración y presentación. No os limitéis a los platos de bacalao, (que preparan como nadie) o las maravillosas sardinas, y disfrutad de las propuestas que os recomienden. Seguro que aciertan.
Si os apetece marisco, os encantará Casa Ramiro, situado en la Avda. Dom Rodrigo de Cunha nº 5 que en mi opinión es una de las mejores marisquerías de Lisboa por calidad-precio y a la que me llevó mi querido amigo Leo.
Si preferís la carne, no dejéis de visitar O Talho en la calle Carlos Testa, un curioso restaurante que es también una carnicería donde, obviamente podréis comer quizás las mejores recetas de carne de la ciudad sin subir de los 30 euros por persona, incluidas sus empanadas, croquetas y otros entrantes.
Si os gusta la cocina asiática, hay muchas propuestas interesantes ya que Goa, un estado de la India fue colonia portuguesa y hay muchos locales que ofrecen esa comida picante y especiada. Si os apetece, visitad Tentaçoes de Goa en la Rúa de S. Pedro Mártir, 23 y veréis cuánto os gusta y qué buenos precios. También hay locales de las colonias africanas, de Angola, Cabo verde o Mozambique, famosas por sus guisos y salsas potentes, que encontraréis en la zona de la plaza de Martim Moniz.
Si os apetecen pasteles de Belem, dirigíos a la Praça do Rossio, y probad los de la Pastelaría Suiça o por allí acercaos a la Confeitaría Nacional, para probar ésta y otras variedades de dulce. Pero si queréis probar los auténticos pasteles de Belem, tenéis que acercaros a ese barrio lisboeta y buscar la Antiga Confeitaría de Belem, donde tras esperar una pequeña cola, podréis comprar una cajita de pasteles recién hechos.
Si estáis en Lisboa en Sábado, lo mejor es que os acerquéis a la estación fluvial de Cais do Sodré, donde podréis cruzar el río Tajo en un ferry para comer una buena Feixoada en los restaurantes del otro lado, desde donde disfrutaréis con las maravillosas vistas de Lisboa que hay a vuestro alcance. Entre los restaurantes que podéis visitar, os recomiendo A-Tira-te-a-O-Rio o otro que se llama O Punto Final.
En el centro de Lisboa, os sugiero visitar la Taberna da Rúa das Flores, en el número 103 de esa misma calle, donde descubriréis platos tradicionales y a muy buen precio.
Si os apetece una sopa reconfortante o una cataplana o uno de sus guisos de arroz, estáis de suerte porque en Lisboa las raciones son enormes y con un plato a compartir y un segundo, saldréis encantados y a precio increíble.
Por la noche para tomar una copa, pasad por el Pavilhao Chinés, en la Rúa D. Pedro V, nº 89. Parecerá cerrado pero tras tocar el timbre os abrirá un encargado que os instalará en una de las mesas. Lo mejor es pedir una copa y disfrutar viendo las colecciones de todo tipo de objetos que os harán pasar un rato muy entretenido.
Con todas estas ideas, el próximo viaje que hagáis a Lisboa vais a tener mucho que hacer, que ver y que contar. Seguro que vuestra próxima escapada a Lisboa estará llena de sabor.
Sed felices,