¿Y por qué no lo haces tú?

Tenía bien clara la imagen de arriba cuando he pensado en este post. Si bien no tiene nada que ver lo que voy a comentar con el reclutamiento militar al que incitaba tío Sam cuando el Gobierno necesitaba carne fresca para librar sus batallas. Pero es una imagen tan icónica, clara y concisa, que viene como anillo al dedo al tema que voy a desarrollar.

“¿Por qué no lo haces tú?” Una frase que simple y llanamente he visto infinidad de veces para criticar negativamente la opinión de alguien. O lo que es lo mismo, si algo no es de tu agrado nada más fácil que utilizarla y a otra cosa mariposa.

Y digo yo, ¿no es más fácil dejar de trollear (que al fin y al cabo para mí la utilización de esa frase equivale a eso) y pensar que todo, TODO, se puede comentar, reseñar, criticar y lanzar a la palestra para el disfrute y debate?

Pues no, parece que para algunos eso no vale.

Lo gracioso, siempre busco ese puntito, del asunto es que aquí -en Tierra de CINÉfagos- se ha dado en varias ocasiones no pocos momentos rocambolescos. Si dices en voz alta que Tom Welling es un cacho de carne inexpresivo (algo evidente que se puede comprobar en cualquier episodio de Smallville) te pueden contestar que tienes envidia (como fué mi caso al pregonarlo a los cuatro vientos), si piensas que Malditos Bastardos no es la obra maestra que muchos piensan te pueden acabar contestando que a saber qué habrías hecho tú, y recientemente si criticas algunos finales de películas de Steven Spielberg… no vayas al baño que te pondrás a mear y no echarás gota. Como me ha pasado a mí.

Alucinante y real. En parte es algo que me indigna profundamente. No es que alguien entre a debatir si en tal o cual aspecto puedes estar equivocado, ya es que directamente te (nos) dicen “Sino les gustan los finales de Spielberg, ¿por que no hicieron ustedes las películas?”.  Esto lo podemos llevar a cualquier aspecto de la vida. Si criticas al Gobierno o a los políticos “a saber qué harías tú”, si criticas que una película esté llena de fx pero vacía de historia “a saber qué habrías hecho tú”, etc.

Como digo, un recurso bastante habitual que creo que todos sabemos qué delata. Seguro que esto lo habéis visto en no pocos foros, blogs o páginas web. Y como suele decirse: Ha pasado, pasa y pasará.