La cocina turca, que en Barcelona suele agradar a quien tenga un paladar sin fronteras, se ha abierto paso en general en el mapa gastronómico de la ciudad apuntando a versiones ‘low cost’, de ‘take away’, o de mezcla de influencias, poco puristas. Otro tanto sucede con los locales que la acogen, que suelen optar por versiones de interiorismo folclóricas y populares como escenario. Así que los artífices de Ali Ocakbasi están convencidos de haber propulsado un espacio único para reverenciar los platos del recetario de Anatolia, darles un punto de innovación, rendirse al fuego para preparar como ningún otro restaurante de Barcelona todas sus versiones de cordero… Y encima, en un ambiente con estilo, diseño y en un calle de moda como Enric Granados.
Uno de los espacios del restaurante Ali Ocakbasi.La calle con más terrazas de la capital catalana ha añadido sal a su ruta gastronómica con este fichaje, que releva al histórico La Polpa, del grupo Andilana. Ali Ocakbasi, que triunfa en Estambul, ha querido exportar a Europa la tradición de su país, puesta al día, en su mejor versión y a través de restaurantes en Barcelona y Amsterdam. El local del Eixample se ha decorado con clase, con los suficientes claroscuros para que la comida luzca y el ambiente pueda resultar tanto íntimo como festivo, y con una elegancia poco habitual entre quienes prescriben kebaps (con ‘p’ en la elaboración turca).
Montaje de mesas.La filosofía, relata su propietario, Aktug Birinci, es “compartir” platos deliciosos, compartiendo también buenos ratos y experiencias en la mesa. De ahí que la inmersión comienza con un carrusel de ‘mezzes‘ o aperitivos, entre los que sería difícil decidirse sin la ayuda del servicio de sala. La carta detalla los ingredientes e incluye impagables fotos de cada receta, pero el camarero da las últimas pistas para adentrarse en ese río de productos frescos, especias, y elaboraciones, donde los vegetarianos encontrarán también un mar de opciones aptas para todos los paladares reunidos.
En el centro, el Cig Kofte, rodeado de otros aperitivos.De esa ruleta de tentaciones, pudimos probar y aplaudir, platillos tan impronunciables como deliciosos como el Cig Kofte (bulgur machacado con tomate, ajo, cebolla, perejil, aceite de oliva y chiles rojos, servido con lechuga y limón, de modo que las hojas verdes sirven para crear una especie de rollitos que resultan frescos y muy sabrosos); Kopoglu (tacos de berenjena frita, patata y pimiento verde, en salsa de tomate servido con yogur); Cirit Efesi (tres tipos de queso mezclados con pesto, piñones y un ‘topping’ de grosella, irresistible) y Ali Tarator (una explosión de sabor a costa de salsa de ajo fusionada con yogur, labneh, cebolla caramelizada y zanahoria, que rematan con remolacha crujiente encima).
Parrilla de altura
No faltan ensaladas coloridas y riquísimas, aunque muchos platos ya se acompañan de verde.
Un plato de Beyti, ideal para compartir.De los entrantes calientes, nos rendimos ante el el Icli Kofte (albondigas de bulgur rellenas de carne picada de cordero y ternera con nueces); o el Citir Kanat (tan simple como alitas de pollo crujientes, pero jugosísimas tras haber sido marinadas con aceite virgen y especias turcas).
Pincho de ternera con aros de cebolla.Presumen de recoger la herencia cultural de siglos de cocina y tradiciones de Anatolia, y si un icono define lo que se cuece en sus fogones (y parrilla) es el cordero. Tanto por la calidad de la carne, suave incluso para los no amantes de este bocado, como por su corte distintivo y las técnicas de marinado y cocción propias.
Una de las estrellas (entre los ‘especiales del chef’) es el Beyti, un kebap de cordero molido a mano, envuelto y a la parrilla en pan lavash, que sirven en rodajas y cubierto con yogur, ajo, perejil, salsa de tomate y salsa de mantequilla, jugoso, equilibrado e idóneo para compartir por su contundencia. Otra versión ‘top’ es el Gevrek, con base similar pero servido sobre puré de berenjenas asadas con salsa de yogur, ajo y tomate.
El cordero es el rey
De la parrilla, cabe destacar el Zirh, también con cordero picado que preparan con sus especias. Por no hablar del Kusleme, que sirven como un solomillo de cordero marinado y fileteado; o en versión de chuletas marinadas, Pirzola. Hay opciones también de ternera (Saslik, extremadamente tierna y conjugada con cebolla en el pincho; o Lokum, un solomillo fileteado), entre un largo repertorio que se detalla e ilustra en la carta, con el denominador común de una brasa que marca la diferencia.
Combo de ternera, cordero picado y rodajas de cordero a la parrilla.La cocina quiere despachar “autencidad” y el listón no decae con los dulces. Solo alcanzamos a probar el Kunefe, una especie de pastel dorado y crujiente con interior de queso fundido y cubierto de jarabe y enriquecido con pistachos. Pero el repertorio es no apto para golosos, rico en miel y frutos secos.
Kunefe, uno de los postres destacados.Tienen una bodega amplia y bien asesorada, y un tíquet medio que puede ser muy dispar, dado que la mayoría de sus entrantes a compartir se mueven entre los 4,9 y 8,9 euros, mientras que los principales más elaborados y copiosos alcanzan los 29 euros.
Ali Ocakbasi. Enric Granados, 69 08008 Barcelona
Tel.: 667 18 86 78