Delicadamente dulces y crujientes, los anacardos están llenos de energía, antioxidantes, minerales y vitaminas que son esenciales para una buena salud.
El anacardo, o “caju” en portugués, es uno de los ingredientes populares en los platos más sabrosos del mundo.
Botánicamente, el anacardo es un árbol perenne tropical de tamaño medio perteneciente a la familia Anacardiaceae, del género Anacardium. Nombre científico: Anacardium occidentale.
El anacardo es nativo de la selva amazónica de Brasil. Se extendió por todo el planeta gracias a los exploradores portugueses y hoy se cultiva a escala comercial en Brasil, Vietnam, India y varios países africanos.
El árbol del anacardo produce muchos frutos comestibles, en forma de pera, o “frutas accesorias”, llamadas “manzanas de anacardo”. La nuez de marañón que es una “fruta verdadera”, se adhiere firmemente al extremo inferior de la manzana de anacardo, que aparece como un colgante de campana. Botánicamente, esta pequeña “fruta verdadera” en forma de alubia con una cáscara externa dura, encierra un único núcleo comestible conocido comercialmente como “nuez de anacardo”.
La cáscara del anacardo se compone de una resina fenólica tóxica, urushiol; una potente toxina que causa irritación de la piel y por lo tanto debe ser eliminada. En las unidades de procesamiento, el anacardo entero se tuesta para destruir la resina de urushiol. Así el anacardo tostado se convierte en seguro para el pelado manual que luego pasa a ser mecánico para extraer el núcleo comestible del anacardo.
La nuez de anacardo mide alrededor de una pulgada de largo, 1/2 pulgadas de diámetro, y tiene la forma de riñón o alubia, con una superficie lisa y forma puntiaguda. Cada nuez se divide en dos mitades como en las legumbres.
Beneficios para la salud de las nueces de anacardo
Los anacardos son ricos en calorías. 100 g de frutos secos proporcionan 553 calorías. Aportan fibra dietética soluble, vitaminas, minerales y fitoquímicos beneficiosos para la salud.
Son ricos en ácidos grasos monoinsaturados “sanos para el corazón” como los ácidos oleico y palmitoleico. Estos ácidos grasos esenciales ayudan a reducir el LDL-colesterol (colesterol malo) y aumentan el colesterol HDL (colesterol bueno) en la sangre.
Estudios de investigación sugieren que la dieta mediterránea, rica en ácidos grasos monoinsaturados, contribuye a prevenir la enfermedad coronaria y la enfermedad cerebrovascular al favorecer el balance correcto de lípidos en la sangre.
Las nueces de anacardo son una fuente rica de minerales esenciales. Manganeso, potasio, cobre, hierro, magnesio, cinc y selenio especialmente. Un puñado de anacardos al día en la dieta proporcionaría suficiente cantidad de estos minerales y puede ayudar a prevenir las enfermedades que aparecen por su déficit.
El selenio es un micronutriente importante, que funciona como un cofactor para las enzimas antioxidantes como las glutatión peroxidasas, uno de los antioxidantes más potentes del cuerpo. El cobre es un cofactor para muchas enzimas vitales, incluyendo citocromo c-oxidasa y superóxido dismutasa (otros minerales funcionan como cofactores para esta enzima son el manganeso y el zinc). El zinc es un cofactor para muchas enzimas que regulan el crecimiento y el desarrollo, la función gonadal, la digestión y la síntesis de ADN.
Los anacardos también son ricos en vitaminas esenciales como el ácido pantoténico (vitamina B5), la piridoxina (vitamina B-6), la riboflavina y la tiamina (vitamina B-1).
100 g de anacardos proporcionan 0,147 mg o 32% de los niveles diarios recomendados de piridoxina. La piridoxina reduce el riesgo de homocistinuria y anemia sideroblástica. La niacina ayuda a prevenir la “pelagra” o dermatitis. Además, estas vitaminas son esenciales para el metabolismo de proteínas, grasas y carbohidratos a nivel celular.
Además, también contienen una pequeña cantidad de zeaxantina, un importante antioxidante de pigmento flavonoide, que se absorbe selectivamente en la retina de los ojos. Se cree que proporciona funciones antioxidantes y protectoras contra los rayos UV y ayuda a prevenir la degeneración macular relacionada con el envejecimiento en los adultos.
Nota: Consulta todas nuestras recetas con anacardos