Si hay algo que me encanta y me apasiona de los cupcakes es que se pueden hacer de casi cualquier cosa y te permiten jugar y combinar elementos para hacer verdaderas delicias. Por eso, no hay nada como adaptar una receta tradicional y transformarla en un cupcake para dejar a todos con la boca abierta.
Esta semana hemos querido fusionar lo mejor de los cupcakes con lo mejor del cheesecake y el resultado han sido estos CUPCAKES DE CHEESECAKE CON FRUTOS ROJOS. Unos cupcakes llenos de color, de vida, de fruta, de aroma y de sabor. Cuando te comas uno, querrás que se pare el tiempo por completo y que ese momento no termine nunca. ¿Te quedas conmigo a descubrir el secreto de este postre?
La receta base es de la gran Alma Obregón, de su libro Objetivo Cupcake Perfecto 2. Como siempre, me he encargado de hacer pequeñas variaciones para darle mi toque personal. Si te gustan los cupcakes, las tartas y las galletas, hazte con todos sus libros porque le sacarás tanto jugo para coger ideas como le saco yo.
INGREDIENTES PARA LA BASE (para 12 cupcakes):
ELABORACIÓN:
1. Pon las galletas dentro de una bolsa de plástico hermética, ciérrala bien y golpéalas con un rodillo de cocina hasta que queden bien trituradas. Si queda algún trocito más grande, no te preocupes. Le dará un toque aún mas crujiente a la base de galletas y estará todavía más rica.
2. Incorpora la mantequilla fundida.
3. Añade ahora el azúcar blanco.
4. Mezcla todo bien hasta que tengas una masa homogénea.
5. Coloca las cápsulas de papel en la bandeja de hornear y pon un par de cucharadas de galleta en el fondo de cada papelito. Presiona con una cuchara hasta que tengas una base lisa y prensada. Deja enfriar en la nevera durante media hora.
INGREDIENTES PARA EL RELLENO (para 12 cupcakes):
ELABORACIÓN:
1. Pon el queso cremoso en el bol de tu amasadora y tamiza sobre él la harina.
2. Ralla la corteza de un limón sobre el azúcar y trabájala con los dedos hasta que se integre por completo con el azúcar. Así conseguirás que ésta tenga un aroma a limón mucho más intenso.
3. Bate a velocidad suave con la pala mezcladora para que se integren bien estos ingredientes.
4. Añade los huevos de uno en uno y mézclalos.
5. Vierte la nata líquida o crema para batir.
6. Incorpora una cucharadita de vainilla en pasta.
7. Por último, añade las fresas cortadas en trocitos.
8. Pon una frambuesa en la base de cada cupcake.
9. Rellena las cápsulas con la masa de cheesecake. En esta ocasión, llénalas hasta arriba porque después, una vez fríos, encogerán un poco.
10. Hornea a 180ºC durante 25-30 minutos o hasta que al pinchar con un palillo éste no salga muy húmedo. Recuerda que antes de hornear el horno debe de estar previamente precalentado.
11. Saca del horno y deja enfriar sobre una rejilla. Al salir del horno parece que van a explotar porque se hinchan mucho, pero a medida que se vayan enfriando, se contraerán.
FROSTING DE QUESO CREMOSO:
Puedes encontrar la receta en el siguiente enlace, ya que está publicada en el blog en el apartado de Tutoriales: BUTTERCREAM DE QUESO.
Una vez que tengas la crema terminada, puedes añadir unas gotitas de aroma concentrado de cheesecake para darle un toque aún más sabroso a tus cupcakes.
DECORACIÓN:
1. Cubre la parte superior de cada cupcake con unas cucharaditas de mermelada de frambuesa.
2. Introduce la crema de queso en una manga pastelera y, con una boquilla 2D de Wilton o con la que más te guste, decora haciendo un copete bajito de fuera hacia adentro en el sentido de las agujas del reloj.
3. Decora con media fresa, una frambuesa y una mora. Si te gusta, también puedes espolvorear un poco de azúcar glasé por encima justo en el momento de servir.
Y el resultado final son estos cupcakes súper jugosos, tiernos, con un aroma increíble a frutos rojos y una presencia que hipnotiza solo con verlos.
La cremosidad del queso de la masa y del frosting contrasta a la perfección con la base crujiente de galleta. Y las frutas que lleva en el interior y en la decoración le dan ese toque refrescante y ácido que a mí me deja embobado y babeando solo de pensarlo.
Los que tuvieron la suerte de probarlos esta vez quedaron encantados y no dejaron ni una migaja. De hecho, muchos pidieron la receta y voilà... aquí la tenéis todos para que nadie se quede sin poder hacerlos.
CONSEJO: estos cupcakes contienen queso crema tanto en la masa como en el frosting, así que es muy importante que los conserves en el frigorífico y los consumas en un margen de 2-3 días. También te recomiendo decorarlos con las frutas justo en el momento antes de servir para que no se pongan mustias y blandas al estar en contacto con la crema.
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Y ya me despido de ti deseándote que tengas unas feliz semana y cocines mucho para compartir el lado más dulce de la vida con todos los tuyos. Te espero la semana que viene con una nueva receta.
Un abrazo enorme.
Jon
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