Hola a todos! Después de una quincena muy ajetreada, vamos recuperando la normalidad... digo vamos, porque la ciudad está en fiestas (y la comunidad también, en Galicia, somos muy "festeiros") y eso altera todo lo que me rodea... hoy se acaban, y el miércoles la ciudad vuelve a su ritmo normal y yo espero que también.
Como disfrutamos de unos días de mucho calor, un helado me parece una propuesta muy adecuada... he hecho bastantes este verano y este es uno de los que más me ha gustado; es muy cremoso y tiene un toque ácido que me encanta.Ingredientes:200 g de Azúcar3 huevos, claras y yemas por separado2 cucharaditas de harina300 ml de leche (yo usé desnatada)450 g de albaricoques deshuesadosZumo de medio limónEsencia de vainilla200 ml de nataElaboración:Ponemos las yemas en un cazo, añadimos la harina, 75 g. de azúcar y la vainilla, mezclamos con un batidor de varillas, lo disolvemos en la leche y lo ponemos al fuego al baño maría removemos hasta que empiece a espesar. Retiramos del fuego y seguimos removiendo 5 minutos. La crema no quedará muy espesa. Dejamos enfriar y refrigeramos.Colocamos lo albaricoques en un cazo con el resto del azúcar y el zumo de limón. Cubrimos de agua y llevamos a ebullición hasta que los albaricoques estén tiernos.Escurrimos los albaricoques, reservando el almíbar y los pasamos por un tamiz para hacer un puré suave. Completamos hasta 600 ml. con el almíbar reservado, dejamos enfriar y refrigeramos.Cuando todo esté muy frío mezclamos las dos cremas y le añadimos la nata montada con movimientos envolventes.Si tenemos heladora, introducimos la crema en la cubeta y seguimos las instrucciones del fabricante.Cuando la crema esté mantecada, antes de introducirla en el congelador, montamos las 3 claras de huevo a punto de nieve firme y las mezclamos suavemente con la crema, lo volcamos en un recipiente adecuado y congelamos hasta que esté firme..Antes de servirlo, lo dejaremos en el frigorífico unos 45 minutos, para que esté más suave y poder disfrutar de todo su saborSi no tenemos heladora: Ponemos la mezcla en un molde y lo llevamos al congelador durante dos horas. Sacamos el helado del congelador y batimos hasta que quede suave. Montamos las claras a punto de nieve firme e incorporamos al helado tierno y congelamos de nuevo siguiendo los pasos anteriores.