Seguro que muchos ya sabéis que soy fan número uno del hummus. Por si alguien no lo sabe el hummus es una crema de garbanzos, salsa tahina, limón y aceite de oliva muy popular en Oriente Medio pero cada vez es más habitual encontrarlo también en España. Muchos supermercados lo venden ya preparado y es un clásico en los restaurantes árabes.
Hace mucho tiempo que publiqué por aquí la receta clásica del hummus de garbanzos. De hecho el hummus fue la primera receta que subí al blog. Eso puede daros una idea de lo mucho que me gusta el hummus.
Aunque ahora muchos supermercados lo vendan ya preparado no hay nada mejor que preparar el hummus en casa. Muchos de los que venden ya preparados están hechos con aceite de baja calidad y suelen poner menos cantidad de garbanzos para abaratar el coste y personalmente, aunque he probado bastantes hummus preparados, el hummus casero sigue siendo el que más me gusta.
Como ya sabéis el hummus está hecho a base de garbanzos pero dentro de la receta clásica se pueden hacer mil variaciones y combinaciones. Una vez probé de hacer hummus de aguacate añadiendo aguacate a la receta original pero la verdad es que no me gustó demasiado y aún tengo que perfeccionar la receta. Lo contrario me ha pasado con esta otra variación de judías blancas, porqué este hummus de judías blancas me ha encantado.
Esta mañana he subido a Instagram las tostadas con hummus de judías blancas que he tomado para desayunar. Las he acompañado de una naranja y la verdad es que apenas he tenido hambre a lo largo de la mañana, aunque me he comido igualmente mi media mañana en la redacción. Lo bueno de esta combinación es que se mezclan los hidratos de carbono del pan de cereales con las proteínas de las judías blancas por lo que te mantiene saciado durante mucho tiempo.
Las judías blancas, igual que el resto de legumbres, son altas en proteínas vegetales, bajas en colesterol y ricas en fósforo y magnesio. Son relativamente bajas en calorías y muy ricas en nutrientes en general por lo que es un alimento que no debe faltar en nuestra dieta.
Yo las compro en una tienda al lado de mi casa que las venden a granel ya cocidas pero si no tienes ninguna tienda así cerca de tu casa puedes comprar las judías ya cocidas en el supermercado o cocinarlas tu en casa. Si las compras en el supermercado intenta que no tengan demasiados ingredientes añadidos y se limiten a las judías, el agua para cocerlas y sal o algún otro conservante.
Espero que os guste la receta y la probéis pronto. Es ideal para untar en tostadas, bocadillos o simplemente para picar con verduras crudas o palitos y se mantiene durante unos días en la nevera en perfecto estado.
Ingredientes:
- 400gr de judías blancas cocidas
- 1 cucharada sopera de tahini o de semillas de sésamo
- Zumo de medio limón
- 2 dientes de ajo o ajo en polvo
- Agua
Instrucciones:
En un bol mezclamos las judías blancas cocidas, la cucharada sopera de tahini, el zumo de medio limón y los dientes de ajo cortados a trozos pequeños.
Si no tenemos salsa tahini podemos sustituirla por dos cucharadas de semillas de sésamo tostadas a la sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra.
Lo trituramos todo y añadimos un poco de agua hasta conseguir la consistencia deseada.
¡Listo!