Revista Cocina

Las mejores especias en tu cocina

Por Paloma Alós @eltercerbrazo

Especias

Hace unos cuantos años atrás, doce para ser más exactos, se estrenó una película llamada en español “La joven de las especias”. Pocos fuimos los que la vieron en ese momento, pero seguramente nos marcó de una manera especial al ver el poder que se decía que tenían esos polvos, pequeñas hierbas y semillas…

Pero como no dejaba de ser una película… quizá lo que se suponía que eran capaces de hacer no era tan real…

Sin embargo, con el correr del tiempo se empezó a conocer más sobre los beneficios de las especias gracias a ciertos chefs de renombre que comenzaron a utilizar las más exóticas. Y también a la medicina ayurvédica que popularizó muchas de ellas a través de sus dietas.

Desde luego que en la cocina occidental hay algunas que son infaltables tales como: el pimentón en todas sus variantes, ají molido, comino, canela molida o en rama, nuez moscada, azafrán, vainilla y algunas hierbas aromáticas convertidas en especias (o sea ya secas y almacenadas) tales como el romero, tomillo y orégano. Aunque no todos saben sus cualidades.

Por ejemplo la canela equilibra el azúcar en la sangre. Por eso reduce los factores de riesgo de la prediabetes, impide los picos de azúcar en la sangre luego de la comida, y protege el corazón.

El orégano combate las infecciones intestinales y vaginales y las úlceras. El azafrán es muy rico en vitamina B2 y la vainilla es un calmante natural para el sistema nervioso.

En tanto el romero, es un poderoso anti-inflamatorio y antioxidante. Se recomienda para reducir los ataques de asma y es beneficioso para el sistema inmunológico, digestivo y cardiovascular.

Por su parte, la nuez moscada ayuda al sistema nervioso, digestivo y reproductor, además de ser astringente, sedante, carminativo, aliviar los espasmos musculares del abdomen y ser afrodisíaca.

Si nos atrevemos a incursionar en algunas de las especias recomendadas por el Ayurveda, podemos encontrarnos con sabores exquisitos que ayudan a equilibrar a nuestro organismo. Entre estas están:

  • El cardamomo que facilita la digestión y refresca el aliento. Hay dos tipos: el de vaina verde que sirve para dar sabor a platos principales, y el de vaina blanca para preparar dulces. Hay que aclarar, que se debe utilizar poca cantidad ya que tiene un intenso aroma y sabor.
  • El clavo de olor, conocido desde muy antiguo, es un eficaz antiséptico, funciona como un analgésico local para el dolor de muelas y ayuda en la digestión.
  • El jengibre, ya bastante popularizado, es muy rico en antioxidantes y tiene un gran poder antiinflamatorio, alivia síntomas de problemas de articulaciones e intestinales, así como problemas respiratorios si se prepara en zumo con miel. Y se ha comprobado también que inhibe el crecimiento de las células cancerígenas, ayudando a reforzar el sistema inmunológico. Con él se pueden condimentar verduras, escabeches y salsas y hasta se puede usar en la preparación de tartas y budines.
  • La cúrcuma. Otra especia que, junto con el jengibre ha comenzado a ser famosa por sus propiedades. Antioxidante, antiinflamatoria, reduce el colesterol, los dolores de la artritis reumatoide, el dolor menstrual y es una potente carminativa. También se utiliza en la prevención y tratamiento del cáncer de mama, de próstata e incluso la leucemia infantil. Es rica en vitamina B6, fibra dietética, potasio, hierro y manganeso. Realmente una especia infaltable en la cocina para las salsas, el arroz y las verduras.
  • La semilla de los chiles, que tienen un componente antiinflamatorio para la artritis. También ayuda a la prevención de los ataques del corazón y derrames cerebrales porque disminuye el colesterol en sangre y la formación de coágulos.
  • Ya fuera del Ayurveda, pero originario de la India y Asia Sudoriental, se puede utilizar el curry, que es una potente mezcla de 16 a 20 especias, entre las que se encuentran cúrcuma, canela, clavo, cilantro, comino, jengibre y pimienta, entre otras. Existen tres variedades: el rojo, el verde y el amarillo que es el más común. Entre sus propiedades se pueden enumerar: acción antiinflamatoria, sirve para el tratamiento de gripes y resfriados; es un antiséptico intestinal. Además previene la diabetes tipo II.
  • La paprika es un equivalente al pimentón utilizado en la cocina húngara. Se pueden condimentar salsas, arroz y ensaladas con ella y carnes para quienes las consumen. Hay dos variantes: una dulce y una picante. Ayuda para el tratamiento de la artritis, purifica la sangre, mejora la digestión, previene infecciones por virus y enfermedades cardíacas; combate el resfriado y la gripe y los radicales libres por tener propiedades antioxidantes.

Existe una gran variedad de especias cuyos nombres, sabores, aromas y beneficios nos resultan desconocidos como Garam Masala o Alhova de la India; el Sansho de Japón, o el Phrik lap de Tailandia por nombrar algunas.

Esto no quiere decir que sea una obligación elegir la más rara y más difícil de pronunciar para lucirse en una comida o para dar qué hablar entre amigos. Pero tampoco cerrar la alacena a alguna que pueda darnos no solo un sabor especial sino que pueda contribuir, como todas las especias lo hacen, a mejorar nuestra salud.


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