Revista Cocina
El jengibre contiene ácidos, fibra, aceites esenciales, aminoácidos y minerales. Su originalidad proviene del sur de Asia. Los beneficios del jengibre son muchos, entre los cuales están:
Para el aparato digestivo, se han empleado remedios con jengibre para tratar afecciones intestinales, el consumo de esta planta, al estimular el páncreas, aumentaría la producción de enzimas que favorecen la digestión y evitan la aparición de efectos secundarios relacionados con una mala absorción. Su poder antibacteriano resulta eficaz para prevenir numerosos problemas intestinales que se producen por alteraciones de la flora intestinal.
Para el aparato circulatorio, porque favorece la circulación sanguínea, debido a que ayuda a disolver los trombos de las arterias y disminuye los niveles de colesterol en la sangre. Se aconseja comer jengibre junto con cebolla y ajo.
Para el sistema respiratorio, es ideal porque puede proteger al organismo de los síntomas de la gripe, los resfriados o la sinusitis en el invierno. Se recomienda una infusión de la raíz seca de jengibre y con unas gotas de limón.
Para los vómitos, los remedios con jengibre para combatir las nauseas que se padecen en un viaje, o después de un tratamiento de quimioterapia o durante el embarazo.
Para las ulceras, porque tiene poder antibacteriano que elimina el Helicobacter pylori, bacteria que infecta al mucus estomacal humano y provoca ulceras. Neutraliza el exceso de ácido gástrico y es otra forma de provocar ulceras.
Los beneficios del jengibre son muchos, pero los mas importantes y propios son antiinflamatorio y antioxidante, su consumo en las comidas ayuda a reducir el dolor producido por enfermedades inflamatorias como la artritis o artrosis. Y su poder antioxidante ayudan a rejuvenecer y combatir los radicales libres que estropean los tejidos.