Merendar y tomar el café de la tarde tendría que instaurarse como costumbre nacional igual que la siesta. Al igual que el desayuno, es un momento de paréntesis y relajación en el día donde además podemos aprovechar para darnos un caprichito bien dulce. Mama Framboise, ubicada en el barrio madrileño de Chueca, es un lugar ideal para calmar nuestros estómagos ansiosos de dulces.
El local me recordó mucho a las golosas cafeterías y confiterías que visitamos en Buenos Aires. Se trata de una pastelería que funciona a la vez como salón de té donde se sirve principalmente repostería francesa: tartaletas, macarrons, milhojas, gâlettes, financiers, etc.
Su estética favorece a que se trate actualmente de un punto de reunión muy reclamado sobre todo entre los más jóvenes, llegando incluso a ser difícil encontrar mesa a ciertas horas.
Casi todas sus realizaciones llevan el sello MF de Mama Framboise. Me parece una inteligente forma de distinguir sus productos de las del resto de pastelerías y de darse a conocer.
Recomiendo que si conseguís mesa os déis el capricho de probar una de sus delicias. Como buena fanática de los croissants, no pude resistirme a probar las variedades de chocolate y frambuesa (1,50€ cada uno). Me quedo, sin duda alguna, con el segundo.
Por favor que se extienda el concepto de Mamá Framboise: ¡arriba las meriendas hipercalóricas!
Ver mapa más grande
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure