Revista Cocina
Me he tomado la licencia de poner este título, tras la visita que hice hace unas semanas a Totel, el obrador de pastelería y repostería de Paco Torreblanca, dentro del estupendo viaje que hicimos unos cuantos bloggers por Alicante, con motivo del aniversario de Gourmet Experience en El Corte Inglés del que os hablé hace unos días. Y es que el título de la entrada Paco Torreblanca y la fábrica de chocolate alude a la sensación que tuvimos todos los asistentes, mientras recorríamos sus instalaciones y probabamos sus deliciosos dulces. Parecíamos los niños que protagonizan la historia del libro de Roald Dahl "Charlie y la fábrica de chocolate", que seguro conoceréis por alguna de sus dos versiones cinematográficas, Willy Wonka y la fábrica de chocolate (Película de 1971 con Gene Wilder como protagonista) y posteriormente Charlie y la fábrica de chocolate (Película de 2005 protagonizada por Johnny Depp) La visita a Totel, el nombre de su obrador de pastelería, fue algo impresionante. Primero por poder entrar y ver todo, probar sus deliciosas creaciones, compartir unas horas con Paco y con su hijo Jacob y charlar, mirar e incluso poder fotografiar con su permiso todo lo que allí se elaboraba. Seguid leyendo y podréis disfrutar de los secretos de este genial artista del dulce, el mejor maestro artesano de la pastelería europea. (Son las iniciales que podéis leer en su chaqueta)
Tras ponernos los equipos de protección, fundas de zapatos, batas y gorros, entramos en el obrador donde todo el equipo de Torreblanca trabajaba en diferentes preparaciones. Por todas partes había máquinas amasando, fuentes con chocolate atemperándose, batidoras, mesas frías de mármol, en fin, no sabíamos hacia donde mirar.
Lo divertido era que pese a que en la entrada se advertía que no se podían hacer fotografías ni filmaciones, a nosotros nos lo permitieron, con lo que la experiencia para un blogger, fue más que placentera. Tras recorrer los distintos puestos de trabajo y escuchar las explicaciones de Jacob y de su padre, nos llevaron a una zona en la que íbamos a probar algunas de las deliciosas preparaciones que realizan en la sede de Totel en Elda. Los impresionantes milhojas de crema, eran de lágrima. (Mirad qué pinta) También disfrutamos de varios tipos de bombones, y de un chocolate caliente, especiado, delicioso que acompañamos de un panettone esponjoso, macarons, croissants, bombones... en fin, un desayuno lleno de delicias. ¿Os habéis fijado en la última foto, la del chorro de chocolate? Daban ganas de beber como si de una fuente se tratara. Le pregunté a Jacob Torreblanca que cómo se sintió de niño cuando podía recorrer la pastelería de su padre, y me contó una anécdota muy divertida: Cuando el era pequeño, llevaba al cole pasteles y bombones de su padre, y los cambiaba por Donuts, Bucaneros, Bonys, Tigretones, y otros bollos comerciales que tenían sus compañeros y que él, no comía (lógicamente), y fue muy gracioso ponerse en su piel por un momento. Para terminar la visita, Paco nos dedicó una tarjeta con su firma que nos hizo con una pluma, que guardo como un bonito recuerdo, y sorpresa final, nos regaló un superpanettone a cada uno. Fue una alegría poder llevarlo a una reunión familiar y disfrutar con los míos de tan deliciosa creación. Aprovecho para contaros, que el próximo domingo 22 de julio, se emitirá en televisión española (La 2) el documental Paco Torreblanca. El arte efímero, según contó ayer en una reunión con empresarios alicantinos, en la que la Diputación de Alicante, cedió el citado documental a la televisión por un período de tres años. Y ahora, ¿entendéis por qué nos sentimos como los niños de la película de Willy Wonka al visitar a Paco Torreblanca? Sed felices,
Muchas gracias al Patronato Costa Blanca, a El Santo Comunicación y a Mar y Javier por la organización del blog trip
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