Por la mañana, cuando suena el despertador, es difícil dejar el calor bajo las sábanas, sobre todo ahora que, incluso sin mirar por la ventana se puede oír el ruido de la lluvia y el silbido del viento! Lo confieso; la única razón que me dio fuerza para levantarme, es que yo sabía que me estaba esperando para el desayuno este esponjoso maravilloso, rico, suave y brillante pastel, para sorprender y compartir con mi familia.
Con esta capa de mermelada de albaricoque que me recordó el calor del sol del verano y los hermosos días que aún resuenan en mi memoria, recordándolos ya con cierta nostalgia. El pecado es de corta duración, y aunque nos deleita hay que volver al día a día; los quehaceres de la casa me esperan y el sonido de la lluvia y el viento me trajo de vuelta al presente!
Pero quiero confesaros que con este pastel tuve un romance a primera vista; fue un flechazo. Cuando lo vi en el recetario de Eva Arguiñano caí redonda a sus pies ¡¡queria hacerlo!! sólo con verlo ya se me hizo la boca agua y aunque últimamente tengo los dulces algo restringidos...había que pecar!!
INGREDIENTES:
5 plátanos 45 gr. de almendra picadas
3 huevos
1 disco de pasta quebrada
1 cucharada de azúcar moreno
1 vaso de azúcar
1 vaso de agua
zumo de 1 limón
harina
mermelada de albaricoque
- PREPARACIÓN:
- Estiramos la pasta quebrada con un rodillo y espolvoreamos un poco de harina. Forramos un molde con la pasta quebrada, recorta la pasta que sobresalga de los bordes y horneamos a 190º C., durante 10-12 minutos.Prepara un jarabe calentando el agua con el vaso de azúcar hasta que se deshaga el azúcar. Aparte del fuego y añade el zumo de limón. Pelamos y troceamos los plátanos en cilindros y cubrimos con el jarabe y el zumo. Dejemos que maceren durante unos minutos como mínimo.
Una vez horneada la pasta quebrada espolvorea la almendra (reserva la mitad)
Añadimos los plátanos macerados
Bate los huevos con un vaso de jugo de la maceración y vierto
Espolvoreamos de nuevo con la almendra y azúcarmoreno.
Horneamos a 190º C., durante 30 minutos.Dejamos que se enfríe, desmóldar y le añadimos una capa de mermelada de albaricoque. Y adornamos al gusto: