Hace ya un par de meses que hice esta deliciosa crema y la voy a tener que repetir, porque casi no queda.La podemos usar en infinidad de postres, como relleno o incluso comerla a cucharadas de lo rica que está, jeje. Además es muy sencilla de hacer y dura mucho tiempo, si no se remedia, claro, jeje.
De momento la utilicé para hacer unos minicupcakes y dos clases de macarons. Poco a poco os lo iré enseñando siempre que lo salado no pida el paso, jeje, que tampoco es cuestión de empacharnos!!!
Se me van acumulando las entradas, unas a medio escribir o con las fotos sin subir y otras en las que ni eso. Pero es que que últimamente, entre que tengo al chico más tiempo en casa y que ando liada con cumpleaños y tartas de fondant, estoy un poco vaga con el blog. A ver si me tomo unas pequeñas vacaciones en agosto y ordeno todo, jeje.
INGREDIENTES:
- 200 gr. de avellanas
- 120 gr. de azúcar
- 50 gr. de agua
PREPARACIÓN:
Primero tostamos las avellanas en el horno a 140º unos 20 minutos, dándole vueltas de cuando en cuando. Dejamos enfriar. Luego ponemos el azúcar y el agua en un cazo y hacemos un almíbar. Cuando llegue a 117º apartamos del fuego, incorporamos las avellanas al cazo y removemos. Vertemos esta mezcla sobre papel de horno hasta que enfríe.Partimos en trozos y molemos en la picadora, en mi caso, un buen rato hasta que se forme el praliné. Guardamos en un tarro hermético y la disfrutamos donde más nos guste.