Ahora sí que estamos en plena Semana Santa. Así que no podemos dejar de pensar en los dulces que nos traen estas fechas. Además de los ricos huevos de Pascua, de los que os hablamos el otro día, un plato que va unido a esta tradicional fecha son las ricas torrijas.
Son un plato con solera dentro de la gastronomía española, de esos que nos hacían nuestras abuelas cuando nos dejaban en su casa. Es una receta sencilla, pero que encandila a los más lamineros.
Necesitaréis pan con miga densa (puede ser de días de antes), leche entera, azúcar, cáscara de limón, naranja, huevos, canela y aceite para freír (puede ser de girasol o oliva). Para poneros manos en la masa, primero pelar el limón y la naranja y echad su piel junto la canela en rama y un poco de azúcar en la leche. Una vez esté todo junto, calentad la leche unos 10 minutos para fusionar los sabores. También podéis echar a la leche algún aroma, como aroma de vainilla para que tome el sabor que queráis.
Después retirad y mojad el pan cortado en rebanadas en la leche, hasta que quede bien empapado. Cuando no escurra, hay que pasar esas rebanadas por el huevo batido y ponerlas en la sartén para freirlas. Se hacen muy rápido, así que no las tengáis mucho rato al fuego o se os quemarán.
Para darles el último toque podéis echarles azúcar y canela en polvo por encima y ya estarán listas para comer.
Si queréis innovar, no os perdáis esta entrada de El Oso con botas, quien nos propone torrijas muy originales, entre las que encontraréis Torrijas con piña, Torrijas con manga pastelera y torrijas con mermelada y leche.
¡Buen provecho!