Las quiches suelen gustar a todo el mundo. El problema se plantea cuando no puedes usar ingredientes básicos como natas, leches, quesos, tomate, pimientos,... Cada vez existen más empresas que elaboran leches sin lactosa o sucedáneos lácteos; así que tocaba experimentar. De esa manera conseguí una quiche apta para intolerantes a la lactosa y a los huevos.
INGREDIENTES:
Queso sin lactosa, el que prefieran, 1 zanahoria, 1 puerro, 1 calabacín, 1 berenjena, 30 gramos de bacón,
150 gramos de salmón ahumado, sal, ajo molido, aceite de oliva y una lámina de pasta quebrada.
ELABORACIÓN: Esta quiche no lleva nata, tampoco huevo; por lo que las verduras quedan un poco sueltas por la zona donde no hay queso. La masa la compré, no estoy muy especializada en hacerla. Pintar el recipiente con aceite de oliva y colocar la masa con cuidado tras extenderla un poco y la pincharla con un tenedor; hornear unos 5 minutos o 10 a 190-200º. Sacar, esperar a que se enfríe un poco y añadir queso sin lactosa en el fondo como se ve en la foto.
EN THERMOMIX: calentar un poco de aceite durante unos 3 minutos, temperatura varoma, velocidad 1 y sin poner el cubilete. Añadir el puerro y la zanahoria previamente troceados durante 4 minutos, habiendo colocado con anterioridad la mariposa. Introducir el calabacín y la berenjena también troceados y aderezar al gusto (ajo molido y sal, en nuestro caso); continuar con la misma velocidad y temperatura unos 5-8 minutos más, en esta ocasión con el cubilete puesto. Verter por el hueco, sin quitar la tapa, el salmón y el bacón. Ojo, vigilar para que no se convierta en una pasta, si hace falta, añadir un poco de agua para que quede jugosa.
DE MANERA TRADICIONAL: calentar un poco de aceite durante e incorporar el puerro picado al gusto, pochar hasta que coja un poco de color y añadir la zanahoria previamente troceada. A los 5 minutos, introducir el calabacín, bacón y la berenjena y aderezar al gusto. Remover y poner un poco de aceite si hiciera falta para que queden jugosas. Mantendremos unos 10 minutos más, agregamos el salmón en tiras, revolver y listo para rellenar la quiche.
Precalentar el horno 10 minutos; mientras, vaciaremos lo que nos quedó de nuestro paquete de queso sin lactosa rallado por encima de las verduras en la quiche. Meter en el horno unos 25 minutos a 190º-200º. Vigilar que no se queme y recuerden lo que siempre digo, cada horno es un mundo. Algunas recetas aconsejan meter primero la masa y hornearla durante unos 15 minuto, luego rellenarla y mantener unos 25 minutos más. Yo hice ese paso sólo durante 5 minutos porque mi relleno no era muy húmedo y aseguro que quedó muy buena, no dejaron ni las migas. Si llevara huevos y nata, sin lugar a dudas, aconsejo hornear la masa esos 15 minutos para que no se humedezca. ¿Te animas a prepararla? ¡Ojo, ten cuidado con la sal porque el salmón de por sí es salado y podrías excederte!