Los tallarines con pimientos es el típico plato de pasta muy colorido, que tanto gusta en la cocina italiana.
Siempre me llamó la atención esa combinación de colores y sabores que suelen hacer por allá. Soy de la idea de que la comida no solo entra por la boca, también debe entrar por los ojos, y este tipo de platos lo tienen todo para engancharnos a la primera, aparte de que son realmente sencillos de preparar.
Existe un cierto debate acerca del origen de este tipo de pasta, ya que hay testimonios que acreditan que ya se preparaba en China mucho antes que en Italia.
Las diferencias vendrían por el hecho de que la harina empleada en China es de arroz o de soja, mientras que en Italia se emplea harina de trigo.
Como en cualquier pasta, la cocción al dente es fundamental, buscando ese punto no demasiado blando. Normalmente está entorno a los 7 minutos, algo más si fuese pasta integral, pero es buena idea tomar pequeños trozos de pasta para comprobar el punto, hasta que le pillemos el truco 😉
Vamos allá con el paso a paso fotográfico: