Hola muy buenas tardes a todos!!! Regresamos después de un pequeño paréntesis. Estamos teniendo un mes de agosto muy intenso y no he podido sentarme y dedicarle el tiempo que necesita el post. Hace varias semanas que quería publicar esta receta y bueno, aquí está!Era una de mis tartas pendientes, un "must do" que me debía desde hace tiempo. Además de las fresas he de confesar que me encantan las cerezas. Los meses de junio y julio son de plena temporada y ahora en agosto aún podemos encontrar algunas en las tiendas. Pues bien además de comer cerezas como si de pipas se tratase, por fin le llegó el turno a la tarta selva negra. Es de esos postres que veía en Reino Unido, que parecen sacados de un cuento y que tenía muchas ganas de probar la versión homemade.
Es un postre típico alemán y su nombre, Selva Negra (Schewarzwälder Kirschtorte), hace alusión a una zona montañosa de la región de Baden, en Alemania. Su aspecto es más que llamativo y toda una tentación! La idea del chantilly con cerezas y chocolate me transportaban a otro planeta...tenía muchas ganas de hacerla en casa. Pasemos a la receta!
Ingredientes:
Para el bizcocho genovés de chocolate. 2 tandas en molde de 18 cm.
- 3 huevos
- 90 grs. de azúcar
- 80 grs. de harina
- 20 grs. de cacao en polvo
- 1 cdta. de vainilla en pasta o extracto
Para el relleno de chantilly
- 500 ml. de nata para montar
- 300 grs. de cerezas
- 1 cda. de vainilla en pasta
- 150 grs. de azúcar glass
Para el almíbar
- 100 grs. de agua
- 100 grs. de azúcar
- 70 ml. de Miura. Crema de guindas o licor de cerezas
- Cerezas al gusto y chocolate en virutas para decorar
Preparación: En primer lugar comenzamos preparando el bizcocho genovés de chocolate. Hice dos tandas. Para elaborarlo batimos el azúcar con los huevos hasta que monten. Que parezca casi un merengue. Añadimos la vainilla. Tamizamos la harina con el cacao en polvo y lo vamos añadiendo con movimientos envolventes para que pierda el mínimo aíre posible. Forramos nuestro molde en la base y laterales con papel parafinado y horneamos unos 20 minutos a 180 grados. Dejamos enfriar.
Mientras horneamos nuestro pastel podemos aprovechar para hacer nuestro almíbar. Para ello añadimos el agua y el azúcar a un cazo junto al licor de cerezas o Kirsh. Si queréis que se evapore el alcohol. Si no, se lo añadiremos al final. Lo dejamos hervir 5 minutos y luego lo tenemos 10 minutos a fuego lento. Apartamos. Descorazonamos las cerezas y las sumergimos o las echamos enteras y luego las deshuesamos, como queráis. Dejamos templar. (Esto lo podemos hacer la víspera y quedarán bien impregnadas nuestras cerezas)
Por otro lado preparamos el chantilly. Vamos montando la nata y agregamos la vainilla y el azúcar. Reservamos en la nevera. Una vez todo preparado, procedemos al montaje de la tarta. Cortamos las capas de nuestro pastel y empapamos de almíbar. Recordad que la base no debe de tener en exceso para que no se rompa. A continuación rellenamos con el chantilly. Luego añadiremos nuestras cerezas boca abajo como se puede ver en la foto.Haremos lo mismo con la siguiente capa y pondremos la tapa de nuestro pastel. Añadiremos más chantilly y decoraremos con las cerezas enteras y chocolate rallado. Queda genial si lo hacéis a cuchillo. Por el chocolate no os limitéis. Es puro gusto.
Del corte de la tarta qué os puedo decir...me tiene enamorada! Además de triunfar en casa estéticamente es una tarta para impresionar. Es ideal para un cumpleaños u ocasión especial. La mantenemos en frío un máximo de 3 días. Con estos calores no queda de otra. Sé que encender el horno supone un gran esfuerzo por las temperaturas que llevamos pero os aconsejo que lo hagáis a primera hora de la mañana o de noche. El esfuerzo merece la pena!
Espero que os haya gustado la receta y si tenéis alguna duda u otra versión y queréis compartirla conmigo, estaré más que encantada. Por mi parte vuelvo lo más pronto posible con más recetitas!
Un saludo muy dulce y a seguir disfrutando del verano!!!
Maribel García 🍓