Uva: 100 % Syrah.
Bodega: Propiedad Vinícola Casa Castillo.
DO Jumilla
Crianza: 14 meses en barricas de roble francés de 500 l.
Precio: 12 €
ELECCIÓN DE: Antonio Rubio, enólogo.
Mi propuesta de cara a nuestra última cata se trata de un vino que por relación calidad-precio, se ha consumido mucho en mi casa. Se trata de Valtosca, ubicada en la DO Jumilla, que se ha convertido en una de las referencias de la uva Syrah en nuestro país. Su viñedo, ubicado en el altiplano de Jumilla (Sierra del Molar) vuelve a ser un ejemplo de los excelentes resultados que nos aporta la viticultura de altura en estos días de cambio climático. Está demostrado que estos viñedos ubicados en altura, sufren en menor medida estos cambios provocados por nuestros excesos contra la naturaleza.
La apuesta de esta comarca es principalmente la uva monastrell, la autóctona de la zona y que tan bien se encuentra adaptada a nuestro clima mediterráneo. Sin embargo a mí siempre me ha llamado la atención de lo bien que han sabido adaptar la uva syrah, otorgándole una personalidad completamente diferente a la syrah francesa o australiana. Aquí obtenemos uvas más sápidas, con mayor presencia fenólica y de alcohol probable, lo que construye vinos más voluminosos y generosos.
En Casa Castillo saben conducir perfectamente el resultado, manejando los excesos de la uva y mitigando sus carencias. Para ello utilizan, como rasgo distintivo, barricas de 500 litros de roble francés, donde además de realizar la fermentación alcohólica y maloláctica, el vino reposará hasta su embotellado. Esto permite maceraciones más largas, a pesar de utilizar roble nuevo francés, sin que la cantidad de fruta en el vino resultante se vea diezmada.
A pesar de ser una añada 2009, catada antes de tiempo, ya muestra los grandes potenciales de este vino excelentemente cubierto y de ribete completamente violáceo. De nariz dominada por la fruta negra típica de la syrah, está perfectamente acompañada de notas de madera y de pólvora.
La boca se encuentra todavía demasiado agresiva para ser consumida y con ciertas notas herbáceas que achacaremos a la añada. Sin embargo y por propia experiencia, sé que este vino dentro de 4 años se mostrará sedoso de taninos dulces y sabrosos, ideal para los paladares más exigentes. Eso sí, habrá que tener la paciencia suficiente para guardarlo, algo que hago habitualmente con este vino. Y es que, en mi humilde opinión, este vino sale al mercado demasiado pronto, evitando de esta forma, que el consumidor inexperto sepa entender lo que se trae entre manos.
Yo le auguro 90 puntos y estoy convencido que seguirá estando en los top ten de los vinos de uva syrah realizados en nuestro país. Quizás se trate de un vino más bien pensado para mercados foráneos pero estoy convencido que se ganará el corazón y el paladar de más de un españolito.
¡Que lejos ha quedado la expresión: ¡Jumilla traidor! la que tan mala fama dio a los vinos de esta zona, gracias a las tiras cómicas del famoso y genial humorista Forges; también vamos a ser sinceros y a confesar que los avances en la enología y vinicultura de los últimos años han conseguido convertir zonas de mal nombre en parajes increíbles para elaboración del vino. Para el que no conozca Jumilla, decir que dicha zona vitícola está en la provincia de Murcia, donde prolifera la uva Monastrell, aunque muchas variedades foráneas se han adaptado muy bien a las características de esta región.
En este caso catamos Valtosca 09, monovarietal de Syrah, variedad de dudoso origen, a debatir entre el Ródano y Persia, aunque seguramente esta última sea la opción más viable. Dicho varietal está bastante extendido por el mundo y podemos disfrutar de sus cualidades en infinidad de países.
Este Syrah que hoy tenemos delante está contenido en una botella borgoñona, vestido con una etiqueta blanca y negra, moderna pero sencilla, donde está escrito el nombre del vino y la información de la bodega.
Al descorcharlo nos encontramos con un corcho de buena calidad con el nombre del vino escrito al igual que la etiqueta y el 09 que denota la añada; una vez servido apreciamos el color rojo, tono cereza madura de bastante intensidad.
El caldo desprende un abanico de aromas bastante curioso, en sus aromas principales de fruta, apreciamos principalmente frutas negras maduras, arándanos y ciruelas principalmente; luego el tostado del roble francés está bastante presente, ya que aunque no tenga mucho tiempo de barrica si que apunta a que es de un tostado medio tirando a medio +. Pero lo más significativo de este vino es que se presenta bastante floral en sus aromas terciarios; si lo catáis al agitar la copa se puede diferenciar perfectamente el aroma de lavanda y de violeta.
Para rematar la faena y con este despliegue de aromas, no nos queda otra cosa que echarlo a la boca; aquí voy a ser un poco más critico y denotar cierto grado de excesiva sobreconcentración en este vino, aunque están más presentes los aromas de frutas del bosque que las ciruelas. La barrica sí que marca mucho el tostado, aunque la tanicidad del vino es más que fina y agradable. En definitiva, este vino es para los amantes de lo potentón.
A maridar con un arroz montañés.
Mi puntuación: 8,9.
Valtosca es un vino que nos presenta a una variedad, la Syrah, que está demostrando sus grandes cualidades para vegetar y prosperar en climas cálidos. Es una uva que posiblemente muestra su mejor rostro en la zona francesa del norte del valle del Ródano, pero que ha sabido aclimatarse perfectamente en otros países tales como Australia, Estados Unidos, Argentina, Sudáfrica, Nueva Zelanda, dada su buena capacidad de adaptación a climas muchos más templados. Y ese es el caso de España, en donde casi no hay un rincón de nuestra geografía en la que no se cultive con buen éxito; elaborándose con ella vinos monovarietales que tienen un denominador común, el saber llegar muy bien al paladar de los consumidores: Extremadura, Cádiz, Madrid, La Mancha, Penedés, Somontano y, por supuesto, todo el Levante.
En la zona de Murcia, en Jumilla, está enclavada la bodega Casa Castillo quien produce con las uvas de la viña Valtosca (valle-tosca) este monovarietal de Syrah.Este vino ha realizado todo el proceso fermentativo (fermentación alcohólica y maloláctica), en roble francés, en el que también ha hecho una crianza de unos catorce meses.
De su cata, a 16º de temperatura, destacamos:
Vista: De color rojo picota con ribete granate, con notas violáceas y azuladas. Limpio, brillante, con una capa media-alta y de lágrima muy densa y con arrastre de color.
Nariz: De buena intensidad, limpia, con complejidad. Es cremosa, con toques de dulcedumbre. La fruta se presenta muy madura, en compota, ligeramente licorosa, con notas de toffee, tostados, chocolate y menta, vainilla, balsámicos, flores violetas y hasta un sutil toque mineral. Un conjunto atractivo y maduro.
Boca: Tiene buen ataque, con amplitud, consistencia y untuosidad. De buena estructura, licoroso, más bien seco, tostado, ligeramente amargoso, con la fruta negra muy presente, taninos carnosos, correcta acidez y un final de boca de persistencia media-alta.
En resumen, estamos ante una buena elaboración de Syrah, que se presenta cálida y mediterránea; con un precioso color vivo y joven; una perfumada y cremosa carga aromática y con una boca intensa, licorosa, consistente y con la frescura suficiente para equilibrar el paso de boca.
Mi valoración: 8,7
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