Cuando no se sabe que hacer con un bizcocho que ha sobrado, que lleva algunos días en casa y nadie se come, o con los restos que nos quedan al cortar los bizcochos de una layer cake para igualarlos, se acude a los magníficos cake pops. La mejor conversión que se ha inventado para unas sobras. Aunque hay gente que prepara los bizcochos especialmente para hacer los cake pops e incluso venden electrodomésticos para hacer las bolitas, están mucho más buenos y se hacen mejor cuando el bizcocho no es reciente y tiene ya unos días. De ahí lo de las sobras.
Es increíble la cantidad de maravillas que se pueden hacer, de los sabores, formas y decoraciones más variadas. Yo de momento sólo me he atrevido con la más sencilla, bizcocho de chocolate negro cubierto de chocolate blanco y decorado con perlas de azúcar de colores. Pero a veces en la sencillez se halla el acierto. Y es el caso de estas delicias. Probarlo vosotros mismos.
♥ Ingredientes:
- Restos de bizcocho de chocolate negro o de brownie
- 200 gr. de chocolate blanco
- 2 cucharadas de queso crema
- Sprinkles para decorar (bolitas de azúcar de colores, corazones de azúcar, cereales, trocitos de cacahuete, almendra o cualquier fruto seco, etc.)
- Pajitas de colores
1. Desmenuzar hasta reducir a polvo los restos de bizcocho que nos haya sobrado de preparaciones anteriores, como pueden ser los resultantes de igualar las capas de una layer cake.
2. Añadir dos cucharadas de queso crema tipo Philadelphia o Mascarpone, y mezclar hasta que todo quede integrado.
3. Hacer bolitas de 20 gr. aproximadamente.
4. Derretir el chocolate blanco a fuego lento.
5. Cortar las pajitas, bañar la punta en chocolate blanco y pincharlas en las bolas.
6. Bañar los cake pops en el chocolate blanco.
7. Decorar con sprinkles y dejar secar.
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