Bollos Holandeses de Canela

Los bollos holandeses de canela son siempre un éxito.

Este tipo de masas dulces son irresistibles y un regalo para el paladar.

ya que los primeros se caracterizan por el caramelo con sabor a canela que se produce al hornearlos.

Se sirven del revés, para apreciar esa capa brillante, cristalina, y crujiente que se forma en el fondo

al fundirse el azúcar pero tanto unos, como otros, son adictivos.

- 200 g. de azúcar moreno húmedo
- 2 cucharadas soperas de canela molida

- Poner en el vaso la leche, azúcar y levadura desmenuzada: 3m. - 37º - V.2
- Añadir el huevo, ralladura de limón y la mantequilla: 10 s. - V.3
- Incorporar la harina y la sal: 2m. - V. Espiga
- Dejar reposar en el vaso, hasta que doble su volumen.
- Sacar la masa y amasar para desgasificarla.
- Dividirla en porciones de 100 g y formar bolas.
- Dejar reposar tapadas unos 15 minutos.
- Entretanto, preparar la mezcla del azúcar y canela y extender sobre la mesa, o como mi caso, sobre una bandeja para evitar ensuciar demasiado y aprovechar el largo de ésta para hacerlos de la misma medida.

- Con cada bola, formar un rollito retorcido y hacerlo rodar sobre la preparación del azúcar y canela procurando que quede bien impregnado.

- Enrollar sobre sí mismo formando una espiral, colocar sobre papel vegetal y aplastar con fuerza con la mano.

- Si queda algo de azúcar y canela, espolvorear sobre los bollos para que queden bien impregnados, ya que al hornearlos, el azúcar se caramelizará.

- Dejar levar hasta que doblen su volumen y meter en horno precalentado a 220º unos 8 a 10 minutos. No hornear demasiado, ya que tienen que quedar muy tiernos y el azúcar debe caramelizar sin que llegue a quemarse ni a ponerse duro.

- Una vez cocidos, sacar del horno, dejar que se atemperen un poco, y darles la vuelta. Este tipo de bollos, se presentan por el revés que es por donde presentan el aspecto caramelizado.