El vino une, todos lo sabemos. No existe bebida en el mundo que contribuya tan bien a la proliferación de las relaciones como el vino. Une, ayuda a la conversación y está presente en toda fiesta que se precie. Este domingo, aprovechando la celebración de San Isidro Labrador en Tomelloso, decidimos mis amigos y yo apuntarnos a una moda que nos “chifla”, la de “irse de vinos”.
Unas buenas tapas, una conversación fluida y sobre todo, un magnifico vino fueron el caldo de cultivo de una agradable jornada, en la que no faltaron las risas, las confidencias y las anécdotas. Elegimos, como ya es costumbre en nosotros, un vino joven y divertido. El Xtales rosado, de la Cooperativa Vinícola de Tomelloso es el vino perfecto para una tarde de domingo. Tiene un sabor semidulce y está gasificado, lo que lo hace verdaderamente refrescante. Además es muy ligero y combina con cualquier comida. Con el diseño moderno de su botella, es ideal para la gente joven.
Ya lo decían los romanos: “Bonum vinum laetificat cor hominis”, que viene a ser algo como que “El buen vino alegra el corazón del hombre”, y la verdad es que es así. Nos encanta salir de tapas y nos gusta aún más que la moda de “irse de vinos” se esté extendiendo, sobre todo entre los más jóvenes. El futuro está en nuestras manos y un “empujoncito” al sector vinícola con iniciativas como esta, no viene nada mal. Desde aquí os invitamos a que pidáis una “copita” de vino en los bares. En su justa medida es bueno para nuestra salud y para la de nuestras relaciones.
Un saludo y ya sabéis, ¡que viva el vino!