Esta ensalada es muy resultona. Resulta muy fresquita y la combinación de gambas y aguacate es un clásico de la cocina. Se añade cebolleta para refrescar aún más y el aliño es de mostaza en grano (a la antigua) con aceite de oliva virgen. Un cóctel de vitaminas y antioxidantes de una tacada.
Para 4 personas:
- 120 g de hojas de lechugas variadas (brotes, etc)
- 300 g de gambas peladas
- 2 aguacates
- zumo de medio limón
- 1 cebolleta
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen
- mostaza rústica o a la antigua
- pimienta
- sal
Cortamos cada aguacate por la mitad, giramos una parte y salen dos mitades, una de ellas con el fruto. Se retira la cáscara y el hueso o fruto y se pican en dados. Se riegan con el zumo de limón para que no se oxiden.
Limpiamos y lavamos la cebolleta y cortamos en rodajas finas. Colocamos en cuatro cuencos las hojas de lechuga y añadimos las gambas, el aguacate y la cebolleta.
Se prepara en un cuenco el aliño, con el jugo de cocción de las gambas, tres cucharadas de aceite y un par de cucharadas de mostaza. Se salpimenta y se remueve hasta que emulsione. Se vierte la salsa en cada bol y se sirve.