A los que os gusten los pimientos asados ¡estáis de enhorabuena!
Alguna vez que otra ya os he hablado de la utilidad y ahorro que supone tener una olla rápida en casa. Desde luego, en mi caso es utilísima. Lo que tardas una eternidad en una olla normal, en ésta lo haces en unos minutos.
El último descubrimiento ha sido preparar estos pimientos asados con mi gran amiga de la que os hablo. Quedan fantásticos y los tenemos listos en menos de la mitad de tiempo de lo que tardamos asándolos en el horno de la forma tradicional.
Además, te ahorras un dineral, porque entre calentar el horno y asarlos, menos de 40 minutos no te los quita nadie, pero en la olla rápida los tienes ¡en 6!
Y anda que no chupa el horno...Vamos, que la ruedecilla esa que gira contando los kilowatios va a todo trapo, y mientras tanto, los magnates de las compañías eléctricas frotándose las manos mientras piensan cual será su próximo destino de vacaciones a nuestra costa...¿Punta Cana? ¿Las Maldivas?
¿Qué os parece? ¿Os animáis a probarlos?
Dificultad: ni una ni media.
Tiempo de preparación aproximado: 10 minutos + tiempo para que se enfríen y para pelarlos.
Raciones: 6-8 personas
INGREDIENTES
Para los pimientos asados en olla rápida:
- 3 pimientos rojos
- 150 ml. de aceite de oliva virgen extra
- 3 dientes de ajo
- 1 cucharada sopera de vinagre de vino blanco
- sal y orégano
- 4 huevos cocidos
- 2 aguacates
- 1 lata de ventresca de atún
PREPARACIÓN
De los pimientos asados:
- Lavamos bien los pimientos y los cortamos por la mitad.
- Vertemos en la olla rápida 150 ml. de aceite de oliva virgen extra.
- Pelamos los 3 dientes de ajo y los cortamos a láminas no demasiado finas. Rehogamos, y cuando empiecen a dorarse retiramos inmediatamente (o amargarán) y reservamos.
- Incorporamos los pimientos a la olla, la cerramos y la ponemos en la posición 2. Una vez empiece a salir vapor por la válvula, empezamos a contar 6 minutos.
- Pasado este tiempo, apagamos el fuego y esperamos a que la válvula baje. Abrimos y sacamos los pimientos con el aceite. Dejamos que se templen, pelamos y cortamos a tiras.
- Los aliñamos añadiéndoles un poco más de aceite, la cucharada sopera de vinagre, sal y orégano. Bueno, esto va un poco al gusto; si os gusta con más vinagre o sin orégano, pues eso ya vosotros mismos...
- Tal y como veis en la foto, colocamos la ensalada de pimientos en el centro del plato y luego la completamos con lo que más nos guste. En este caso con aguacate, ventresca de atún y huevo cocido.