Entrevista del mes: Bodegas Emilio Moro

Seguimos la serie de entrevistas con otra bodega de la familia Moro. Este mes de noviembre hablamos con Elena García, de la propia bodega Emilio Moro en Pesquera de Duero. Sus propuestas para el enoturista son muy variadas y atractivas y nos descubren toda la excelencia y tradición de una de las zonas vinícolas más atractivas de nuestro país.

¿Desde cuándo recibís visitas en la bodega?
Bodegas Emilio Moro se empezó a construir en 1987 y en 1989 comenzó la producción. Casi desde ese mismo día, la familia Moro abre las puertas a todos los que quieren conocer más de cerca la esencia de nuestro vino. Cada año, son más los turistas que se acercan a nuestras instalaciones en busca de nuevas experiencias.

¿Qué distintos tipos de visitantes tenéis?
Tenemos un perfil muy diverso, aunque predomina el turista nacional de edad media que suele acudir en un grupo de amigos o en pareja. Recibimos muchos turistas de Madrid, a poco más de una hora, que dedican su fin de semana al turismo del vino. En los últimos años, está creciendo también el número de familias con niños pequeños que nos visitan para disfrutar de nuestros talleres y actividades más dinámicas. Por nuestras Bodegas pasan, además, extranjeros interesados en conocer más de cerca la Ribera del Duero y sus vinos, o verdaderos enoturistas con los que intercambiar conocimientos.

Durante el último año, ¿habéis visto incrementar el número de visitantes?
Todos los años aumenta el número de turistas. Hay un montón de gente interesada por el vino y por el turismo del vino. Cada temporada, hacemos un esfuerzo por ofrecer a nuestros visitantes iniciativas novedosas que tratamos de combinar con otras actividades como la visita al Museo Provincial del Vino, rutas por el viñedo, propuestas de alojamiento en la zona… Además, desde hace varios meses facilitamos a nuestros turistas la reserva online a través de nuestra página web. En ella, pueden consultar nuestras novedades y horarios disponibles y en apenas unos minutos reservar su visita.

Además de las visitas, ¿ofrecéis algún otro tipo de servicio turístico, como cursos de cata, eventos, conciertos, talleres…?
Uno de los pilares de nuestra filosofía es la Innovación. En Bodegas Emilio Moro innovamos no sólo en la manera de elaborar nuestros vinos y cuidar el viñedo, sino también, en los servicios que ofrecemos.
Además de la visita tradicional, nos esforzamos para que el turista se sienta parte de nosotros y conozca todos los secretos de la elaboración del vino de una forma lúdica y práctica. Todas nuestras ofertas se pueden combinar, además, con la oferta que ofrecemos en nuestro restaurante. Un buen ejemplo de ello es nuestro Tour Viñedo, un recorrido en 4×4 en el que disfrutar del paisaje de la Ribera del Duero, pisar nuestro terreno y admirar cepas centenarias mientras se degustan nuestros vinos.

Otro taller que sigue ganando adeptos es el Taller de Barricas, en el que buscamos enseñar a nuestros turistas a valorar la influencia de la madera en el proceso de elaboración del vino y a distinguir el roble francés del americano.
Pero además, invitamos a los visitantes a que participen de nuestra solidaridad. Hace ya cuatro años que pusimos en marcha el Tour solidario Apadrina Tu Cepa, una preciosa iniciativa con la que recaudamos fondos para nuestra Fundación Emilio Moro. Una experiencia en la que cada padrino o madrina, durante el periodo de un año (renovable), tiene la tutela de una cepa, a la que se le coloca un distintivo con su nombre, firma y fecha de apadrinamiento. Esta acción solidaria incluye además una visita guiada a las instalaciones de la bodega, una comida casera tradicional en el restaurante de la bodega y una botella de obsequio. Además, durante el período de un año se envía puntualmente información del estado y labores realizadas a la cepa.
También, organizamos eventos para empresas o particulares adaptándonos a sus necesidades y ofreciéndoles un servicio personalizado.

¿Tenéis algún producto o plan especial para familias con niños?
Poner en valor la tradición y la cultura de nuestra tierra y acercarlo a nuestros jóvenes, son algunos de nuestros objetivos principales. En este sentido, este año hemos puesto en marcha el concurso Mi Primera Vendimia, una iniciativa dirigida a los centros públicos y concertados de las nueve provincias de Castilla y León, en la que ha colaborado la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León y tiene como objetivos fomentar la creatividad infantil, el conocimiento y el arraigo a la tradición vinícola de la zona.
Como les comentaba anteriormente, es frecuente ver a familias por nuestras Bodegas los fines de semana. Conscientes de ello, nuestro equipo de profesionales adapta las explicaciones al tipo de público que nos visita. Además, en la actualidad nos encontramos desarrollando actividades alternativas para los más pequeños, de manera que los padres pueden disfrutar de la visita más tranquilamente.

¿Tenéis previsto ampliar vuestra oferta en cuanto a enoturismo? ¿En qué sentido?
La misión de Bodegas Emilio Moro es elaborar y transmitir nuestra pasión por el vino, como mejor catalizador de las relaciones humanas. Por ello, siempre estamos pensando en qué servicios, experiencias y tours podemos ofrecer para lograrlo.

¿Estáis integrados en la Ruta del Vino? En caso afirmativo, ¿en qué consiste vuestra colaboración?
Sí, formamos parte de la Ruta del Vino de la Ribera del Duero desde 2012 y colaboramos con esta entidad para la promoción y difusión de nuestro territorio y toda su riqueza.

¿Vendéis productos propios en la bodega? ¿Qué es lo que más se vende? ¿Se incrementan las ventas cada año?
Tenemos a disposición del cliente una sala de ventas en la que ofrecemos todas las marcas que tenemos en el mercado, además de asesoramiento. Como ocurre con las visitas, las ventas también aumentan cada año. En nuestra sala de ventas, se encuentran también los artículos de nuestra Fundación Emilio Moro cuya recaudación se destina íntegramente a sus proyectos.

¿Tenéis muchos visitantes extranjeros?
En estos momentos aproximadamente el 20% de nuestros visitantes son de procedencia internacional. Todas nuestras visitas se realizan también en inglés, francés o alemán.

Los turistas que os visitan, sean nacionales o extranjeros, ¿suelen repetir?
La fidelidad por nuestra bodega es algo que percibimos en un grado muy alto, no sólo porque los visitantes vuelven para comprar vino, sino también porque quieren realizar otras actividades diferentes a las que ya han disfrutado (por ejemplo, turistas que hacen el Tour Viñedo repiten otro día con Apadrina tu Cepa). Esto nos motiva para crear y proponer nuevas iniciativas y experiencias que permitan fidelizar a nuestros consumidores.

¿Qué opinas sobre el enoturismo y su futuro?
El enoturismo, y más concretamente el enoturismo en la Ribera del Duero, está en pleno auge. Según una encuesta realizada por el Observatorio Turístico de las Rutas del Vino de España, la Ruta del Vino Ribera del Duero, a la que está adherida Bodegas Emilio Moro, es la más visitada dentro de las 25 Rutas del Vino certificadas que existen en España. España es uno de los principales destinos turísticos del mundo. Tenemos la mayor superficie mundial de viñedo y somos uno de los primeros países productores de vino del planeta. Tenemos historia, cultura, gastronomía, clima, paisaje, arquitectura, y además, muy buenos vinos. A menos de una hora de cualquier ciudad española hay una denominación de origen que visitar. España debe estar entre los principales destinos enoturísticos del mundo y las bodegas tenemos que esforzarnos cada vez más por ofrecer servicios de calidad y comunicar nuestra riqueza.