Hola muy buenos días a todos!!! Estamos a una semana justa del día de Navidad y regresamos con una receta clásica por estas fechas como son las galletas de jengibre. ¿Existe alguien en la sala que aún no las haya probado? Ya sean compradas o caseras, creo que casi todos hemos superado esa fase. Son una tradición como ya comenté en el post anterior, donde podéis ampliar información sobre el origen del gingerbread o pan de jengibre que da lugar a esta masa. Son muy populares en países europeos y en américa del norte pero creo que cada vez son más conocidas en nuestro país. No puedo pasar un año sin hacerlas. Desde que las probé, me tienen enganchada. Se deshacen al comerlas, las especias y el azúcar panela, le dan unos matices increíbles...además que quedan súper bonitas! No me digáis que no! Son perfectas para regalar. Siempre que las hago termino repartiéndolas a familiares y amigos. Pasemos a la receta!
Ingredientes:
- 260 grs. de harina
- 150 grs. de mantequilla punto pomada
- 5 grs. de bicarbonato
- 1 cdta. jengibre en polvo
- 1 cdta. canela molida
- 100 grs. azúcar panela
- 1 huevo
- pizca de sal
- Mini-Lacasitos, chocolate de cobertura y sprinkles para decorar
Para la glasa:
- 300 gramos de azúcar glass
- 1 clara de huevo
- Una gotas de zumo de limón
Preparación:
Comenzamos añadiendo en un bol la harina tamizada, el bicarbonato, el jengibre, la canela, la sal y el azúcar panela.Batimos el huevo y lo agregamos a la mezcla. Después añadimos la mantequilla poco a poco sin dejar de batir.
Cuando tengamos una masa homogénea, la estiramos con el rodillo en una superficie con un poco de harina. Vamos haciendo nuestras galletas con los cortadores. El de hombre de jengibre si lo invertimos nos sirve para hacer renos! El grosor es de aproximadamente medio centímetro. Precalentamos el horno mientras tanto y horneamos unos 15-20 minutos a 180 grados. Retiramos cuando estén doraditas. El aroma en la cocina las delatará. Dejamos enfriar completamente en una rejilla.
Para la glasa, comenzamos batiendo ligeramente la clara de huevo. Agregamos unas gotas de zumo de limón y seguimos batiendo. Tamizamos el azúcar glass y la vamos incorporando poco a poco.Podéis sustituir la clara de huevo por una pasteurizada o una cucharadita de cremor tártaro.
Incorporamos la glasa a una manga con boquillas finas para galletas y las vamos decorando pacientemente. ¡Qué momento! Hacemos varios puntitos y luego pegamos los Mini-Lacasitos a modo de botones de colores. Para las decoraciones de chocolate, fundí un poco al baño maría y lo incorporé a la manga una vez tibio. Dejamos templar hasta que tenga buena consistencia.
Me encanta decorar las galletas. Es un momento muy especial y da gusto hacerlo en familia!
Espero que os haya gustado la receta! Es ideal para estas fiestas, para hacer en familia, para compartir meriendas...Y sobre todo para continuar una tradición que en mi caso ya es un hecho. Me declaro fan número uno del gingerbread. En la anterior receta podéis ver el pan de jengibre, que se basa en estos ingredientes si queréis hacerlo en otro tipo de elaboración y que viene ideal también.Ya está todo iluminado, hay revuelo de gente cada tarde buscando regalos, paseando, disfrutando de las coloridas y frías calles...ya está llegando la Navidad! Vuelvo muy pronto con más recetas navideñas! Un saludo muy dulce!
Maribel García 🍓