
Comenzamos la semana con algo rico y refrescante. Como ya dije hace unos días con el helado de turrón de jijona, la temporada de helados caseros ha comenzado en casa (la de helados en general nunca se cierra con mi hija y mi marido). Esta vez os traigo un helado de café, coco y chocolate.
Posiblemente los niños no sean muy amantes de esta combinación, pero a mi hija, en contra de todo pronóstico, le gusta.
Aunque no sé de qué me extraño, porque hay veces que como nos despistemos cuando echamos mano de la taza de café para tomarla ella se la ha bebido... en serio!! Café solo... negro!!!
No es de ahora esto, que ya hace tiempo que el café le gusta y de hecho cuando me tomo el café con leche por la mañana muchas veces me pide que le moje las galletas en mi café, en vez de mojarlas ella en su leche.
Habrá quien se escandalice, pero como le dije a mi marido, que seguro que los mismos que se escandalizan luego le dan Coca-Cola a los niños.
En mi familia no nos dejaron beber cola hasta los 16 años (alguna vez cayó algún traguito, aunque fuese de estranjis)... Cosas de mi padre, que oye, visto lo visto hoy día, me parece muy bien.
Y el café, aunque no lo teníamos vedado, no comencé a tomarlo hasta pasados los 18 años... Básicamente porque no me gustaba, y cuando lo comencé a tomar fue porque iba muerta de sueño entre el trabajo y la universidad.
En estos helados he comenzado mis pruebas con el azúcar invertido. He substituido el 25% del azúcar blanquilla por el invertido.
El mismo día de hacerlos se notaba la diferencia de dureza en el helado. No llevan excesiva materia grasa y este tipo de helado suele congelarse y quedar bastante duro, pero con el uso del azúcar invertido quedan bastante más suaves.
Y ahora a por la receta!!!

Ingredientes:
- 400 gr leche de coco
- 20 gr azúcar invertido
- 60 gr azúcar blanquilla
- 1 c/p esencia de vainilla
- 2 tacitas de café expreso
- 4 c/s coco rallado
- 100 gr chocolate negro 70% cacao
- 50 gr aceite de coco
Preparación:
- En un cazo ponemos la leche de coco, el azúcar invertido y el azúcar normal. Calentamos mientras vamos removiendo hasta que el azúcar quede bien disuelto.
- Retiramos del fuego y añadimos la esencia de vainilla, el café y el coco rallado y removemos bien.
- Dejamos enfriar y rellenamos los moldes. Ponemos en el congelador.
- Cuando los helados estén bien congelados, en un cazo ponemos el chocolate junto con el aceite de coco y fundimos removiendo continuamente.
- Dejamos enfriar y ponemos el chocolate en un vaso alto. Desmoldamos los helados y los bañamos en el chocolate. En cuanto lo bañamos lo metemos en el congelador y el chocolate se solidificará al momento.
Qué aproveche!!!
Ella también quería hacer de modelo en las fotos

¿Eres de los que les gusta el café?


