Hace unos días he publicado la segunda versión de las orejas de carnaval para que podáis disfrutarlas durante estos carnavales.
Pensando en otro postre original y que nadie haya hecho por ahora para estos días de disfraces y fiesta, se me ocurrió hacer la masa de las orejas, pero rellenarla de fruta, en concreto con cerezas confitadas.
Y el experimento salió delicioso, porque además de disfrutar del sabor de estas estupendas orejas de carnaval en tamaño mini, tenemos un contraste de sabor genial gracias a la cereza confitada y frita que llevan dentro estas sorpresitas de carnaval.
Es una receta que podréis hacer al mismo tiempo que realizáis vuestras orejas para cambiar un poco las tradiciones. Dejaréis a vuestros comensales sorprendidos por una idea tan original y que no os ha supuesto ningún trabajo a mayores.
Vamos con la receta:
INGREDIENTES:
- 700 grs de harina
- 5 huevos
- 50 grs de mantequilla
- 1/2 copita de licor de anís.
- Una pizca de sal
- 1/2 taza de agua
- Azúcar glasé para espolvorear.
- Aceite de girasol 1 litro o litro y medio para freír.
- Cerezas confitadas (1 por cada oreja rellena).
ELABORACIÓN:
Creamos la masa según lo hemos descrito aquí.
Luego lo que haremos será estirar la masa del tamaño que más nos apetezca e introducir una cereza en el medio.
Luego lo que haremos será cerrar la cereza como si fuese un sobrecito. Y estirar lo máximo posible las esquinas de la masa para que la masa sea de lo más crujiente.Luego procemos a freír cada una de las orejillas de carnaval rellenas.
Una vez adquieran el color dorado típico de las orejas, escurrimos todo el aceite y depositamos en la fuente a servir.
Espolvoreamos con azúcar glasé y podemos presentar en la mesa.
Y esta es la pinta que tenían las mias. ¿A que apetece comérselas de un bocado?
Pues a trabajar chocolateros y que se os haga la boca chocolate con esta nueva receta.
¡Un besazo!
Quizás también te interese: