Cuando preparé Paté de tomates secos (receta aquí) les hablé sobre las bondades de los patés vegetales caseros. Sin embargo, no me canso de repetir que entre ellas sobresale el hecho que, al prepararlos en casa, sabemos con certeza qué ingredientes utilizamos y la calidad de ellos. Además, son verdaderamente prácticos porque se preparan muy rápido, con técnicas bien simples.
Por eso, son ideales para incluir en la picada con amigos o para darnos algún antojo sabroso en cualquier momento del día. No se requiere de muchos ingredientes, ni de productos demasiado exóticos o de utensilios difíciles de tener en casa para poder disfrutar de su sabor fresco y delicado.Hoy les propongo realizar un Paté de hongos Portobello que les encantará sin dudas, porque es suave, bien gustoso y muy cremoso.
Para ello necesitarán tener a mano estos ingredientes...
Manos a la receta, entonces.
En una sartén, rehogá en 2 cucharadas de aceite neutro 1 cebolla picada junto 100-150 gramos de hongos Portobelllo (la cantidad es orientadora; en mi caso, eran 3 hongos Portobello grandecitos que pesaban unos 120 gramos), cortados como más te guste. Condimentá con 1 cucharadita de orégano y 2 cucharaditas de cebolla deshidratada.
Es importante que no sazones más hasta el momento en que los hongos estén cocidos para que no pierdan mucho líquido y malogren la receta. Por esta misma razón, también es importante que dejes a los hongos que se cocinen tranquilos y no los estés revolviendo constantemente.Una vez blandos los hongos y las cebollas traslúcidas, volcá la preparación (no debe tener agua; si hubiera algo de aceite de la cocción no es necesario desecharlo) en mixer o licuadora. Condimentá con sal, pimienta, nuez moscada y 1 cucharadita de pimentón ahumado. Luego, incorporá 10 gramos de pan triturado (en mi caso era pan lactal sin la corteza) y procesá hasta obtener una pasta cremosa.
Si fuera necesario, añadí aceite en forma de hilo hasta lograr la textura deseada (cremoso-consistente-untable). Dejá templar o enfriar antes de servirlo.Podés conservarlo por unos 7 días en la heladera. Antes de consumirlo, dejalo que tome temperatura ambiente.
Si no conseguís hongos Portobello, podés reemplazarlos por los clásicos champiñones París y, dependiendo del tipo de pan que emplees en la preparación, la receta también es apta para celíacos.
Con su textura aterciopelada y su sabor gourmet, este paté se luce por sí mismo en cualquier entrada/entrante. Pero, además, les garantizo que se llevará todos los elogios (y les pedirán la receta, acuérdense lo que les digo...) en una picada entre amigos, porque no tiene nada que envidiarles a sus pares cárnicos tradicionales.
Cada vez que lo preparo, sé que debo hacer doble cantidad para compartir porque a todo el mundo le encanta y pide más. En casa es uno de los preferidos de mi familia.
Espero que se animen a probarlo porque no quedarán para nada desilusionados con su sabor, untuosidad y textura.
Hasta la semana que viene. ¡Qué la pasen muy bien!