Revista Cocina
Hoy traigo unos rigatoni con espárragos verdes y tomates secos para el reto de Asaltablog. Es una pasta sabrosa, deliciosa y con un toque diferente.
No sabía que receta escoger del blog El Mito del Sofrito, porque tiene cosas deliciosas, pero al final me decidí por sus rigatoni con espárragos verdes. He hecho una versión un poquito diferente con atún y tomates secos. ¡Simplemente deliciosos!
Tenéis que pasaros por su blog El Mito del Sofrito porque tiene recetas de todo tipo y a cada cual más rica. Asaltar su cocina ha sido un verdadero placer, aunque que difícil ha sido mirar este blog con hambre porque... ¡está lleno de platos riquísimos!
Ingredientes:1 manojo de espárragos verdes1 paquete de rigatoni 500gr1 bote de tomate frito1 bote de nata ligera4 latas de atún1 tarro de tomates secos deshidratados en aceite paladar selectoperejil y albahacaaceite, sal y pimienta2 huevosqueso ralladoElaboración:En primer lugar picas los espárragos en trocitos pequeños. Antes pon en una cazuela agua con un poco de sal y aceite para luego cocer la pasta. Deja que se caliente.
Echa la pasta en la cazuela y deja que se haga los minutos que pone en el paquete. A mi me gustan que se hagan poco y estén al dente. Luego reserva la pasta y la pones a escurrir. Mientras pon en la sartén con un poco de aceite los espárragos.
Cuando estén dortaditos los pasas a la cazuela donde hicimos la pasta con un poquito de aceite y pones a fuego lento.
Luego añade las latitas de atún. Yo eché dos latas pero luego añadí al final dos más para que tuviera más atún.
Escurre el tarro de tomates secos en aceite y los echas en la cazuela con los demás ingredientes. Yo los puse enteros pero si no os gusta comer cachos grandes córtalos en trocitos.
Añade el tarro de tomate frito y el de nata, yo he usado una ligera para que sea más suave y con menos calorías.
Añade las especias, la albahaca y el perejil. Luego remuévelo bien todo para que se mezclen los ingredientes.
Por último añade a la cazuela los huevos previamente vacios, ya con el fuego apagado y sírvelos en el plato.
Por último, espolvorea con el queso que más te guste, en mi caso le eché queso en polvo.