Rollo de carne en el microondas

Son increíbles los cambios tecnológicos que vivimos hoy en día. Tenemos al mundo encerrado en nuestro teléfono móvil. Debo reconocer que a mí me sigue alucinando que, en tiempo real, puedas mantener una conversación con alguien que está en la otra punta del mundo. Ciertamente, eso ya se puede hacer desde hace muchas décadas por teléfono, pero hemos pasado de hablar con alguien que está en el extranjero en una conversación condensada en un minuto porque eran llamadas carísimas, a tener video-llamadas 'gratuitas' o mandarnos fotos en el mismo momento en las que nos las hacemos.
Yo me compré mi primer móvil con mi primer sueldo, y el debate ahora es a que edad un niño necesita tener móvil... Los tiempos cambian y cambian rápido.
Pero no solo ha habido cambios en el ámbito de las telecomunicaciones. También en la cocina. Haced memoria, ¿cuándo visteis o tuvisteis en casa un microondas? Yo me acuerdo perfectamente. Fue en casa de mi tía Mª José, cuando se casó. Mª José es mi tía más joven, nos llevamos 12 años, así que más que una tía, es como mi hermana mayor.
Ella es una mujer muy práctica y cuando llegó ese pequeño electrodoméstico a su casa, quiso sacarle todo el partido y no reducir su uso a calentar la leche del desayuno o a descongelar. Así que asistió a los cursos gratuitos que impartían al comprar uno.
Y la receta que tenéis a continuación, fue de las primeras cosas que cocinó. Espero que os guste.

Ingredientes:

- 1/2 kg. de carne picada (yo suelo mezclar ternera y cerdo).
- 8-9 lonchas de queso tipo sandwich.
- Tomate frito.
- 1 huevo
- Sal.
- Orégano.
- Pan rallado.
Preparación:
Mezclamos, en un bol grande, la carne picada, el ajo machacado, un poco de orégano, el huevo batido, sal, una cucharada de pan rallado y una cucharada de tomate frito. Lo mezclamos bien, para que quede homogéneo.
Lo ponemos encima de un trozo de papel parafinado (yo se las pido al carnicero). Lo extendemos con forma de cuadrado de unos 2 cms. de grosor. Encima ponemos dos 'pisos' de lonchas de queso y lo enrollamos (como si fuese un brazo de gitano).
Ponemos el rollo en una fuente apta para el microondas y lo metemos en dicho electrodoméstico.
Primero 5 minutos al 100% de potencia del micro, y luego 10 minutos bajando la potencia al 75%.
Cuando termine el tiempo, lo sacamos y lo cubrimos con papel aluminio, con la parte mate hacia fuera. Lo dejamos enfriar.
Para comerlo, lo partimos en rodajas y lo acompañamos de tomate frito.