Revista Cocina
Los sábados me gusta hacer pan, tengo más tiempo y puedo permitirme tiempos de levado más largos, además puedo observar cómo evoluciona la masa, esto es muy importante porque aprendes como corregir posibles errores y como modificar o mejorar los panes.
La receta es de “El libro del pan”, bainet editorial. Y como nos dice en sus páginas: “Lo mejor es comerlos recién sacados del horno. Rellenos de panceta y con un huevo frito, son un manjar para el desayuno. La mezcla de leche y agua produce una miga suave y el espolvoreado adicional de harina les da una corteza tierna”.
Desde luego con aceite y jamón o mantequilla y mermelada, están deliciosos, no los he probado con panceta y huevo, aunque no me cabe duda que estarán de muerte pero me parece demasiado para un desayuno.
Con estas cantidades salen 8 panecillos, la receta no incorpora ningún tipo de masa madre y los tiempos de fermentación no son muy largos, os recomiendo la receta para los que empezáis con el pan, es sencilla y el resultado en muy bueno.
Los panes se pueden congelar pero no creo que os queden para hacerlo.
Vamos a ponernos el delantal y a meter las manos en la masa ¿os apetece?
INGREDIENTES:
175 ml de leche tibia
175 ml de agua
2 cucharaditas de levadura seca
1 cucharadita de azúcar
500 g de harina de fuerza
½ cucharadita de sal
1 cucharada de leche para el glaseado
PREPARACIÓN:
Mezcla la leche y el agua en una jarra graduada. En otro tazón, echa la levadura y el azúcar en 100 ml de la mezcla de leche y agua. Deja 5 minutos; revuelve para que se disuelva. Añade revolviendo la mitad del resto de la mezcla de leche y agua.
En un cuenco grande mezcla la harina y la sal. Haz un hoyo en el centro y vierte la leche y el agua con levadura. Mezcla con la harina. Añade revolviendo el resto de la leche y el agua, según sea necesario, hasta formar una masa pegajosa.
Vuelca la masa sobe la superficie ligeramente enharinada. Amasa durante 10 minutos, hasta obtener una masa homogénea y elástica.
Pon la masa en un recipiente limpio y ligeramente engrasado con aceite, tapa con un paño de cocina. Fermenta 1 hora, hasta que duplique su tamaño. Deshincha con la palma de la mano y después deja reposar 10 minutos.
Divide la masa en ocho trozos iguales. Da a cada trozo forma ovalada, de aproximadamente 1 cm de espesor.
Pon sobre una placa de hornear enharina. Pinta cada panecillo con leche y espolvorea generosamente con harina utilizando un tamiz o colador.Fermenta sin tapar de 30 a 45 minutos, hasta que dupliquen su tamaño.
Vuelve a espolvorear generosamente harina sobre cada panecillo. Con el pulgar haz una marca de aproximadamente 1 cm de profundidad en el centro de cada uno.
Mete en el horno previamente calentado a 200º y deja de 15 a 20 minutos, hasta que se hinchen y cojan color dorado pálido. Tapa con un paño y deja enfriar sobre una rejilla metálica.
Buen fin de semana