Todos o casi todos conocemos a los tomates cherrys, esos pequeños tomates que toman su nombre de la palabra inglesa que significa cereza. Si, los tomates cherrys tienen a veces aspecto de cereza, y nos hemos acostumbrado a verlos en la frutería con ese bonito color rojo intenso, aunque también tenemos variedades de diversos colores, verde, amarillo, naranja....
Los tomates cherrys son la forma más antigua de los tomates, son los que crecen de forma salvaje en disitintas zonas de América y hasta no hace muchos años se utilizaba sólo como elemento decorativo. De hecho ahora mismo los elegimos para nuestros platos porque son muy vistosos, pero debemos saber que tienen las mismas propiedades que cualquiera de las otras 10.000 variedades de tomates. ¿A que impresiona? Yo los uso desde la primera vez que los ví aparecer en la frutería. bien aliñados son una aperitivo fantástico, y en una tarta como esta también. ¡Os dejo la receta!
Ingredientes:
- 1 paquete de masa de hojaldre
- Tomates cherry variados
- 1 puerro
- 4 huevos
- 200 gr. de queso de cabra
- 1/2 taza de leche evaporada
- Sal y pimienta
Elaboración:
Vamos precalentando el horno a 180º. Mientras, forramos un molde de tarta baja o de quiche con la masa de hojaldre y pinchamos bien con un tenedor por toda la superficie. Cortamos el queso de cabra en discos y los repartimos por toda la superficie.
Luego cortamos en rodajas el puerro, lo rehogamos en una sartén con aceite de oliva y reservamos.
En un bol batimos los huevos junto con la leche evaporada e incorporamos los puerros a la mezcla.
Vertemos la mezcla sobre la masa y colocamos los tomates cherrys por toda la superficie. Luego horneamos durante 35-40 minutos.
Veremos que está lista cuando la masa se vea doradita y notemos que está cuajado todo el relleno. Dejamos enfríar o templar, ya que esta tart está rica fria y templada.
Bon appétit