Os voy a dar dos versiones que me he inventado para poder comer más a menudo este riquísimo, pero hipercalórico postre. He intentado reducir sus calorías sin que su sabor cambie demasiado, y creo que lo he conseguido.
VERSIÓN I
Ingredientes
Para 6 torrijas aproximadamente
- 6 rebanadas de pan (yo he utilizado el de larga duración de mercadona)
- 300 ml de leche
- 200 ml de nata (18% materia grasa)
- 120 g de azúcar
- 4 yemas de huevo
- 1 rama de canela
- Ralladura de un limón
Elaboración
- Poner en un cazo la leche, con el azúcar, la nata, la rama de canela, y la ralladura de limón. Llevar a ebullición y retirar del fuego cuando hierva.
- Dejar templar, con el cazo tapado, para que se infusione bien la leche.
- Retirar la rama de canela y batir las yemas de huevo con la leche aromatizada.
- Echarla en una fuente amplia e incorporar las rebanadas de pan. Dejar reposar hasta que se empapen bien.
- En la plancha o en una sartén añadir un poco de aceite y tostar las rebanadas de pan por ambos lados.
- Finalmente espolvorear con azúcar glass y canela en polvo.
VERSIÓN II
Esta versión es más light, ya que he reducido su contenido en azúcar y he suprimido la nata. En cuanto al sabor, ambas versiones son semejantes.
Se sustituye la nata por leche, es decir, será necesario 1/2 litro de leche. Las 4 yemas utilizadas en la versión anterior se reducen a 2 huevos en esta otra. Otra de las diferencias es el azúcar, en vez de echar 120 g se echan 3 cucharadas soperas.
Espero que os gusten ambas recetas y que disfrutéis comiendo torrijas con menos calorías.