Ingredientes:
- Tres patatas grandes
- Seis huevos
- Una cebolla pequeña
- Pimientos rojo y verde
- Un diente de ajo
- Sal
- Aceite de oliva
Antes que nada, asegura que la sartén que utilizáis es antiadherente o la más vieja, maltrecha y curada sartén que haya en casa. Retira la piel de las patatas y lávalas. Corta transversalmente por la mitad y continúa cortando cada mitad en sucesivos cortes transversal, como si estuvieses cortando para hacer patatas fritas. Después de cortar a lo largo, corta pequeñas láminas finas toda la patata y reserva. Parece complicado pero simplemente busca cortar trozos muy finos, es mejor así porque a la hora de freír se elaboran mejor y más rápido. Ya has cortado las patatas y ahora corta en trocitos pequeños el diente de ajo, la cebolla y los pimientos. Todo, añade a la sartén con mucho aceite de oliva, casi a rebozar. No es necesario que el aceite esté caliente, simplemente agregas los ingredientes, el aceite y enciendes el fuego. Esperas que comience a burbujear, dejas que cuezan los ingredientes del fondo unos minutos y despacio, con calma, recuerda que la sartén reboza en aceite, mezclas con una cuchara de palo para que todo se poche y que las patatas luzcan transparente, mejor momento para retirar del fuego. Coloca en un bol los seis huevos y sal. mezcla con un simple tenedor hasta unir. Ahora y con mucho cuidado, coloca un plato llano encima de la sartén y gira a un lado para intentar retirar la mayor cantidad de aceite y dejar secas las patatas. Ya que las patatas fueron cortadas muy finas, diría yo que no hace falta pero si te interesa que quede más suave incluso, con el tenedor escacha un poco más las patatas. Agrega al huevo y mezcla. Con la misma sartén y con una cucharada de aceite calienta a fuego fuerte, agrega la mezcla y luego baja a fuego suave, incluso bajo para que vaya cuajando por dentro. Cuando necesites dar la vuelta, y esta es la parte más complicada, coloca de nuevo el plato llano encima de la sartén y gira por completo hasta que la tortilla se pose en el plato y deja resbalar a la sartén para que se cuece por el otro lado. Antes de dar la vuelta, asegurate que no se ha pegado, que resbala dentro de la sartén. Deja que cueza unos minutos más por el otro lado, también a fuego suave y ya está listo. Espero sea de vuestro agrado. Una comida completa como esta siempre nos acompaña cuando salimos en familia a la montaña, incluso siempre gusta un bocadillo con tortilla. ¡Fenomenal! ¡Feliz día a todos!