"Me obligo" gustosamente a dar la receta de estos bizcochos, después de que me la han pedido. Hace tiempo que vengo haciéndolos aprovechando las frutas de temporada. Siempre quedan más jugosos que los bizcochos normales pues la masa se queda más hidratada al ponerle la pulpa de las frutas.Se puede poner sólo el zumo, pero también la fruta entera. Yo hago las dos versiones, pero hoy toca la receta que la lleva integrada. Se le quita la piel a la fruta y se le retiran los huesos (si los tiene), luego sólo hay que batirla y proceder como de costumbre. Contad con que son bizcochos más húmedos.
En su tiempo (el año pasado) hice uno de ellos con la fruta del carambolo. En el márgen de la izquierda lo véis. Un detalle y el corte en las fotos de abajo.
Hoy os dejo el bizcocho con naranja. Para hacer los demás tendréis que sustituir el peso de la naranja, más o menos, por el mismo de la fruta elegida.
Ingredientes:
- Huevos 3 L.- Yogur blanco, sin azúcar 1.- Azúcar 2 vasos (con la medida del vaso del yogur).- Harina de repostería 2 vasos (con la medida del vaso del yogur).- Naranja 1 y su piel rallada (tamaño medio, unos 250 g.).- Levadura química 1 sobre.- Aceite de girasol 1 vaso (con la medida del vaso del yogur).
Elaboración:
Preparamos un molde engrasado y enharinado. Encendemos el horno a 180 ºC.
Rallamos la naranja (no tratada) y reservamos su ralladura. Retiramos la piel blanca de la naranja muy bien (para no dar amargor al bizcocho) y si tiene huesos los retiramos igualmente. Cortamos en trozos y la batimos (batidora con cuchillas) con el aceite hasta hacerla puré.
Batimos las yemas con el azúcar al punto de blanqueado (con varillas). Incorporamos la ralladura, la naranja batida con el aceite y batimos unos minutos más.
Incorporamos tamizadas la harina y la levadura, a mano.
Añadimos las claras montadas con varillas, firmes, con un pellizquito de sal, en dos veces, envolviendo con cuidado la mezcla.
Volcamos en el molde y horneamos cuarenta y cinco minutos (según horno). Vigilad la cocción clavando una aguja en el centro del bizcocho.
Desmoldar, cuando haya reposado, sobre rejilla.
Adornad a vuestro gusto.