Me encantan las carrilleras, especialmente las de cerdo. Si, si las carrilleras esa carne tan gelatinosa que corresponde exactamente al musculo masticador del animal, dicho de otra forma los carrillos.
Si no las has probado nunca, te recomiendo de una manera muy especial que las pruebes, podría decirte muchos cosas buenas de esta carne, pero te diré solo una cosa, es una carne diferente.
¡Buen provecho!
INGREDIENTES:
-2 carrilleras de cerdo por comensal.
-1 cebolla.
-1 puerro.
-1 vaso de vino tinto.
-Sal y pimienta recién molida.
-Laurel, romero y perejil.
-Aceite de oliva.
PREPARACIÓN:
Picar la cebolla y el puerro.
Salpimentar las carrilleras.
Poner la olla al fuego con un chorro de aceite de oliva. Enharinar ligeramente las carrilleras y freír en la olla hasta que estén doradas.
Agregar la cebolla, los ajos y el puerro dejando rehogar unos minutos.
Añadir el vino el romero el perejil, el laurel y 1 vasito de agua.
Cerrar la olla y cuando suban los 2 aros bajar el fuego y dejar cocer durante 20-25 minutos.
Retirar con cuidado el romero y el laurel.
Sacar a un plato las carrilleras y en la misma olla pasar la salsa con la batidora de mano. Volver a poner en la olla las carrilleras dejando hervir a fuego bajo un par de minutos.
Servir calientes con su salsa y con patatas fritas como guarnición.
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